Llega a la redacción de TN luciendo con orgullo las canas que decidió no taparse más. Trae con ella algunos items infaltables: una botella de vidrio resistente a todo, un vaso térmico, bolsas de tela y un recipiente que es algo así como "la gran estrella" de esta historia. Dafna Nudelman, la "activista imperfecta" e impulsora del consumo responsable, se dispone a contarnos por qué bajo la bandera del "Zero Waste", o "Desperdicio Cero", decidió crear su propio alter ego e invitar a que muchos modifiquen pequeños hábitos cotidianos.
La loca del taper es el nombre que adoptó y su propuesta consiste en dejar de lado la utilización de plásticos descartables de un solo uso (bolsas, vasos, cucharas y bandejas, entre otros) y a tener su propio set de los mismos productos, pero de materiales reutilizables, que justamente reemplacen a esos plásticos de un solo uso. Así, se decidió a armar una cuenta de Instagram, bajo el nombre de su personaje, donde combina todas sus pasiones: el diseño, la comunicación y la sustentabilidad.
"Esto empezó como algo más voluntario, con la primera iniciativa en la facultad de Arquitectura, me metí más en la economía ambiental, en el desarrollo sustentable. Me di cuenta de que hay que dejar de pensar que podemos extraer recursos ilimitados de la naturaleza", cuenta.
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Sobre su personaje, agrega: "La loca del taper es el personaje ficticio basado en hechos reales, que surge de los hábitos que fui adquiriendo después de muchos años de trabajar para promover el reciclado, para generar concientización y educación ambiental sobre el reciclado. Después de ocho años de trabajar en eso, dije: 'el reciclado está siendo bastante difícil'. Más que promover que se reciclen los plásticos o las cosas descartables, necesitamos reducirlas, evitar que se genere el residuo".
Mientras despliega los pequeños objetos que la acompañan, dice: "Yo empecé como muchos a ir con mi bolsa a hacer las compras. Y con mi botella a comprar algo para tomar, para no usar botellas de plástico. Ahora digo que soy 'la loca del taper' porque ya voy con mi propio taper a buscar comida, para no volver con una bandejita de plástico, o con un pote del telgopor".
Por supuesto que esta iniciativa no vino sola. Fue el resultado de elegir otra forma de vivir, de optar por una manera más liviana de estar en el mundo. "Reducir es consumir menos de todo: ropa, accesorios, todo. Toda la movida Zero Waste o "Cero Desperdicio" viene de la mano del minimalismo. A lo Marie Kondo, la idea es solo tener cosas que nos hagan felices, que queramos, que cuidemos. Tener menos cosas, más valoradas [...] Tiene que ver con darnos cuenta que todo lo que hacemos afecta al mundo. Nos separamos tanto de la naturaleza que nos olvidamos que somos parte de ella. Todo está conectado".
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Para adoptar este cambio de perspectiva, fue necesario para Dafna vencer la barrera de la vergüenza y la resistencia externa para impulsar un cambio. "Yo me sentía pesada, la loca que insiste para que no le den cucharita en la heladería. Y cuando fui con el taper, pasé de ser la loca de la cucharita a la loca del taper [ríe] Cuando empecé hace nueve años a hablar de estos temas en la facultad, éramos cinco gatos locos. Hablábamos de separación de residuos, de reciclado y eran pocos los que nos escuchaban. Ahora cambió completamente".
¿Cómo se convierte una activista de la sustentabilidad en algo así como una influencer? Quizás la respuesta más clara se encuentre en los intereses que mueven a las nuevas generaciones. "Me sorprende a esta altura que haya tanta gente interesada, comprometida. Y cuando decimos: 'es que me da vergüenza' hacer algunas de estas cosas, lo que debería darnos vergüenza es lo que hacemos ahora: usar una bandeja que dura diez minutos y tirarla, usar una botella que requiere tres veces la cantidad de agua que traslada y tirarla. Está bueno que empecemos a cambiar de a poco, cada uno desde su lugar. No hay excusas".
