El Tribunal Oral Criminal N°9 ordenó que el perfil genético de Jorge Mangeri, el femicida de Ángeles Rawson, sea enviado al Registro Nacional de Datos Genéticos vinculados a Delitos contra la Integridad Sexual (RNDG). La medida se resolvió luego de que el exportero, condenado a cadena perpetua en 2015, se negara a entregar su ADN para que formara parte del programa.
// Jorge Mangeri se negó a entregar su ADN para el registro de violadores
El oficio fue firmado por el juez Fernando Ramírez y remitido este martes a las autoridades del Cuerpo Médico Forense, a quienes solicitó hacer entrega al RNDG de la muestra de ADN tomada a Mangeri durante la investigación por el femicidio de Rawson.
Jorge Dotto, director del RNDG, había informado esta semana sobre la presentación de dos oficios al tribunal con el requerimiento. Tras la emisión de la orden judicial, el genetista ya se comunicó con el Servicio de Huellas Digitales Gnéticas (SHDG) para exigirles la remisión de la información con la mayor brevedad posible.
De esta forma, el ADN del exportero podrá ser incorporado al programa luego de su negativa a que le practicasen el hisopado bucal necesario para su obtención.
Reglamentado el 17 de julio de 2017, el RNDG busca tomar las muestras de más de 22 mil abusadores sexuales con sentencia firme en todo el país, iniciativa que podría facilitar el esclarecimiento de delitos contra la integridad sexual.
La condena a Mangeri
En 2015, Jorge Mangeri fue condenado por el TOC N°9 a prisión perpetua por “femicidio, abuso sexual y homicidio agravado criminis causae”, fallo que fue confirmado en 2017 por la Sala II de la Cámara Nacional de Casación en lo Criminal y Correccional.
Para el tribunal, el exencargado de la portería del edificio interceptó a la joven de 16 años el 10 de junio de 2013, cuando ésta regresaba de una clase de gimnasia. En ese momento, el hombre inició un ataque sexual que, ante la resistencia de la víctima, terminó en el femicidio de la joven por sofocación y estrangulamiento. Finalmente, se deshizo del cuerpo arrojándolo en una planta del Ceamse de la localidad de José León Suárez, donde fue descubierto por la Policía luego de que su madre radicara una denuncia para dar con el paradero de Ángeles.
