Javier Bertoli, Santiago Bertoli, Andrés Bordolis y Javier Wiesener tienen ganas de ganar. Son chicos de Don Orione que desde hace diez años practican el arte marcial que es, desde hace algunos años, el deporte de contacto más practicado del mundo.
El mundial de taekwondo será en octubre en Dublin y, para llegar, los chicos pasaron muchas rondas eliminatorias, compitieron y derrotaron a decenas de competidores. "Participan los mejores exponentes de la disciplina y entre ellos, estarán los argentinos que desde que clafisicaron, se las ingenian para conseguir la plata para viajar", explica Raúl Alvarenga, campeón Panamericano y profesor de los chicos.
Se preparan desde hace meses y "están a la altura de las circunstancias" asegura Roberto Barrientos, otro de los profesores."Todo el sacrificio, estudio y entrenamiento dio sus frutos y los dejó frente a esta oportunidad soñada".
Los chicos son de familias de trabajadores, saben que no es fácil juntar los cuarenta mil pesos para viajar al mundial. Para conseguirlo, hacen rifas, organizan bingos y pidieron ayuda de todas las maneras posibles. “Son un ejemplo para sus compañeros y para la gente humilde, porque demuestran que las grandes chances están al alcance de todos”, indica Alvarenga.
Javier y Santiago Bertoli son hermanos, campeón y subcampeón del mundo respectivamente y sueñan con ganar la competición. "Entrenamos doble turno, no salimos los fines de semana y nuestros amigos entendieron que lo que más no importa es el taekwondo", cuenta Javier. El esfuerzo de la familia es un capítulo aparte, el papá trabaja de camillero en un hospital y la mamá en casas de familia. "Sabemos lo que cuesta mantener una familia además ayudarnos a cumplir nuestro sueño, por eso el mayor regalo que podemos hacerles es demostrarles que nosotros lo valoramos con compromiso y pasión", dice Santiago.