La higiene del baño es una de las tareas más importantes y demandantes del cuidado del hogar. Uno de los focos de atención suelen ser las cortinas, que con el pasar del tiempo acumulan restos de jabón y en las que se puede generar moho.
Tanto el jabón como el moho, producto de la humedad, afectan su apariencia y, a largo plazo, pueden ser contraproducentes para la salud. Aunque en el mercado hay distintos productos para limpiarlas, hay una alternativa que se guarda en la cocina de la casa que es de gran ayuda: el vinagre blanco.
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Cómo limpiar la cortina de baño con vinagre blanco
Se puede hacer de forma rápida y sencilla. Basta con seguir estos pasos.
- Preparar la mezcla: en un recipiente, hay que combinar una parte de vinagre blanco con dos partes de agua tibia.
- Aplicar a las cortinas: al momento de hacerlo, es necesario tener un paño o una esponja. Hay que hacer énfasis en las áreas con más jabón o, en caso de que haya, el moho.
- En caso de manchas difíciles: cuando no salen con facilidad, se recomienda aplicar el vinagre blanco directamente sobre las manchas persistentes. Luego, dejarlo durante unos minutos y luego frotar.
- Enjuagar: para terminar, hay que enjuagar con agua tibia para retirar cualquier residuo.
Un detalle importante, en relación con el cuidado de las cortinas, es fundamental enjuagarlas después de cada ducha. Otro aspecto clave: procurar que el baño tenga una buena ventilación. La primera recomendación es relevante para eliminar los restos de jabón, mientras que el segundo contribuye a reducir la humedad y, por tanto, evita que se generen las manchas de moho.
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Con estos consejos, las cortinas de baño no solo estarán limpias; también lucirán como nuevas, sin necesidad de recurrir a productos químicos agresivos. Otras opciones que se pueden considerar para la limpieza son:
- Lavandina.
- Bicarbonato de sodio.
Al igual que el vinagre blanco, ambos productos contribuyen a limpiar las cortinas e higienizarlas. De esa forma, se previene la aparición de moho.
