No es exagerado pensar que el teléfono se volvió una extensión de las personas. En cada dispositivo hay una enorme cantidad de datos, claves de accesos, imágenes y métodos de entretenimiento que atraen. Eso propicia hábitos como llevarse el celular al baño y revisarlo, una práctica cada vez más común y contraproducente.
Hay estudios que sugieren que las personas lo usan, en promedio, de 10 a 15 minutos. Sin embargo, también hay usuarios que exceden ese tiempo y pueden pasar media hora revisando el teléfono mientras están en el baño. Buena parte de ese tiempo se dedica a aplicaciones como TikTok o Instagram. ¿De qué manera esto puede afectar la salud?
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Higiene y exceso de pantallas: los riesgos de revisar el celular en el baño
Según especialistas, pasar más de 30 minutos en el baño, mientras se navega en distintas aplicaciones o chatea, puede ser una señal de varios comportamientos problemáticos. Dentro de estos se incluyen trastornos en el hábito intestinal hasta síntomas de dependencia digital.
De acuerdo con la Cleveland Clinic, permanecer sentado en el inodoro durante períodos prolongados, sobre todo si se usa el teléfono, puede aumentar el riesgo de hemorroides. Este se incrementa porque se ejerce una presión innecesaria sobre las venas del recto.
Desde el punto de vista psicológico, la Asociación Americana de Psicología (APA) advierte que el uso excesivo del celular (incluso en momentos de higiene o intimidad) puede ser un síntoma de dependencia digital.
Además de esto, podría estar asociada con una forma de evasión de situaciones de estrés, ansiedad o incluso aburrimiento. En contextos como el baño, esto se convierte en un ritual de escape, donde la persona busca privacidad para interactuar con su dispositivo sin interrupciones.
Un estudio de 2022 publicado en Addictive Behaviors Reports encontró que un uso compulsivo del teléfono en el baño puede estar vinculado a una disociación del entorno físico. Este consiste en que el usuario pierde noción del tiempo, lo cual es un patrón asociado al uso problemático de la tecnología.
El caso de Estados Unidos
Esto se produce en un contexto en el que un reciente estudio determinó que los estadounidenses dedican, en promedio, 49 horas al año a revisar el teléfono mientras están en el baño. Esto equivale a más de dos días completos dedicados a navegar en redes sociales, ver videos o responder mensajes desde el inodoro.

La encuesta se basó en una muestra de 500 personas. Dentro de los aspectos revelados por The New York Post en un reportaje, se reveló que consultados formaron parte de los distintos porcentajes y conductas:
- El 66% de los encuestados usa su tiempo en el baño para scrollear en redes sociales.
- Un 40% también ve videos.
- Un 37% prefiere responder mensajes.
- Un 36%, además de algunas de las opciones anteriores, lo hace para leer noticias.
- Un 9% lo usa, incluso, para trabajar.
Además de los riesgos mencionados, se estima que solo 1 de cada 4 personas limpia su teléfono después de usarlo en el baño. Esto puede llevar a enfermedades como:
- Resfriados.
- Gripes.
- Problemas gastrointestinales.