El ahorro en el uso del agua puede ser fundamental para que lleguen boletas menos abultadas a fin de mes, sobre todo con el constante incremento del precio de los servicios y las dificultades económicas. En las últimas semanas, se volvió furor un interesante truco que permite reducir drásticamente el consumo y que solo requiere el uso de una botella.
Por supuesto, algunas acciones como tomar duchas más cortas o tardar lo menos posible mientras nos lavamos los dientes pueden ser claves tanto para disfrutar de una tarifa baja como a la hora de cuidar el medio ambiente. De todas formas, el gasto suele ser impresionante en cuanto a las cantidades: si bien los datos varían según cada persona y sus necesidades, se calcula que se utilizan 133 litros per cápita al día.
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Curiosamente, la descarga del inodoro es la que provoca el mayor consumo durante una jornada, pese a que solemos ocupar ese espacio apenas un puñado de veces a la semana. Tirar de la cadena, un gesto cotidiano, puede suponer un gasto de 30 litros diarios, lo que representa una cuarta parte del total. La estadística anual es todavía más aterradora: se usan más de 10.000 litros de agua con ese fin.
Cómo es la técnica con la botella de agua para gastar menos
Por supuesto, se trata de una acción ineludible y completamente necesaria para mantener en condiciones el baño, pero existe una técnica que se viralizó a través de las redes sociales. Por lo pronto, solo hace falta una botella de plástico, con el tamaño estándar de un litro, que se deberá rellenar del líquido incoloro e inoloro para colocar dentro de la cisterna.
Así, la intención es achicar al máximo posible la capacidad del depósito, lo que derivará en un menor desperdicio cada vez que se presiona el botón. La recomendación fue brindada por organizaciones tales como la española Fundación Aquae, que pidió tener cuidado al situar el recipiente: poner el envase de forma incorrecta podría interrumpir la función de la mochila y provocar eventuales fugas indeseables.
El método es especialmente efectivo para aquellos artefactos que no tienen doble descarga, ya que en esos casos se puede elegir cuánta agua dejar fluir para la respectiva limpieza. La estimación internacional es que se podrían ahorrar unos 450 litros al mes, el equivalente a 5000 litros al año. Sin embargo, Aguas y Saneamiento Argentinos (AySA) cuenta con procedimientos diferentes para realizar su propia contabilización.
Cómo hace AySA para calcular el gasto en el hogar
En principio, el organismo registra la lectura con un medidor en metros cúbicos, dependiendo del período de facturación -puede ser cada 30 o cada 60 días-. A su vez, incluye conceptos como cargos fijos y variables, así como impuestos y posibles deudas. En el caso de no contar con el aparato, el consumo se basa en función de la superficie cubierta de la unidad, la superficie total del terreno y diversas características de la propiedad.
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La entidad estatal, al mismo tiempo, fomenta el gasto responsable y ofrece varias herramientas para optimizar el uso en el hogar. Lo ideal es revisar y reparar daños en las cañerías; cerrar las llaves de paso de cada habitáculo cuando no nos encontramos en el lugar; adquirir electrodomésticos eficientes; regar el jardín de modo eficiente; aprovechar el agua de lluvia para hacer determinados lavados; y exigir planes de pago con descuentos en los intereses.
