La tabla de planchar tradicional puede quedar en el pasado. Cada vez más personas optan por una alternativa más rápida y versátil: la plancha a vapor vertical. Este dispositivo se impone en los hogares modernos por su facilidad de uso, su eficacia contra las arrugas y su capacidad para cuidar mejor las telas.
Se trata de un electrodoméstico que funciona con vapor de agua a alta temperatura, ideal para dejar la ropa lista en cuestión de segundos, sin necesidad de usar tabla ni presionar con fuerza. Solo hay que colgar la prenda en una percha, aplicar el vapor y ver cómo las arrugas desaparecen.
Leé también: Ni lavandina ni jabón en polvo: cómo eliminar las manchas amarillas de la ropa blanca
En menos de un minuto, una camisa, remera o vestido puede quedar 100% alisado. Además, al no aplicar contacto directo con el tejido, es una excelente opción para telas delicadas como lino, seda o prendas sintéticas que se dañan con facilidad con las planchas tradicionales.
¿Cómo funciona una plancha a vapor vertical?
El aparato calienta el agua en su interior y la convierte en vapor, que sale a través de una boquilla. El mismo penetra las fibras de la tela, al suavizarlas al instante y eliminar pliegues y marcas.
Las versiones portátiles se pueden usar en cualquier lugar: dormitorio, baño o incluso mientras la ropa ya está colgada en el placard. Las versiones más grandes incluyen soporte con ruedas y gancho para colgar la ropa, y son muy utilizadas en locales de ropa o para uso profesional.
Leé también: Adiós gastos innecesarios: arreglá tu ropa en 5 minutos
Principales ventajas de la plancha a vapor
- No requiere tabla ni superficie plana: se usa con la ropa colgada.
- Más rápida: alisa una prenda en menos de un minuto.
- Cuidado de las telas: ideal para ropa delicada.
- Desinfecta: el vapor elimina bacterias, ácaros y olores.
- Liviana y portátil: se puede llevar de viaje o guardar fácilmente.
- Ahorra espacio y tiempo: perfecta para departamentos chicos o rutinas apuradas.
