Una de las discusiones más recurrentes a la hora del cuidado y la limpieza del hogar es la de cada cuánto hay que cambiar las sábanas de la cama donde uno duerme. Una buena higiene en el lugar donde una persona descansa y reposa es clave, para lograr un mejor sueño y también para cuidar la salud de quienes se acuestan allí.
Lo cierto es que la gente suele dar distintas respuestas: una vez por mes, una vez cada dos semanas, o los más extremistas hablan de cada algunos días. Lo cierto es que la ciencia tiene una respuesta para esta consigna: las sábanas deberían cambiarse una vez por semana.
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Se debe tener en cuenta que las sábanas de una cama no son como la ropa, o cualquier otro elemento del hogar: allí se pasan varias horas durante la noche y, aunque puedan parecer que están limpias, los microbios que allí habitan no llegan a verse a través de la mirada humana. Al dormir, el cuerpo libera células muertas, aceites y humedad.
Según una investigación, el 62% de las mujeres y el 29% de los hombres cambian las sábanas cada 15 días. Por otra parte, las personas que están en pareja son las que menos frecuencia tienen en hacer esto con un 17%. Esto muestra que las opiniones al respecto están verdaderamente divididas.

Una sábana no está sucia solamente cuando se derrama algún líquido, o quedan restos de comida si se cenó en la cama, sino que mientras las personas duermen, se desprenden restos de piel muerta para renovarse, liberando además sudor y otros fluidos.
De esta forma, la ropa de cama se convierte en campo de cultivo de ácaros y bacterias que se alimentan de todos estos residuos que desprende el cuerpo humano. Incluso, también pueden proliferar ciertos hongos. A esto hay que sumarle que si la persona se encuentra enferma, o duerme con sus perros en la misma cama, el cambio de las mismas podría requerir una frecuencia mayor.
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En ese sentido, la ciencia investigó y llegó a una respuesta concreta sobre la importancia de cuidar la higiene al cambiar las sábanas. En una entrevista publicada por el medio francés l’Intern@ute, el doctor Charles Gerba, microbiólogo de la Universidad de Arizona y el dermatólogo Alejandro Ruiz, quien se especializa en la salud del sueño en el Hospital Clínico de Barcelona, hablaron de esta cuestión.
“Cambiar las sábanas semanalmente reduce significativamente la cantidad de ácaros del polvo y alérgenos en la cama, mejorando la calidad del sueño y la salud en general”, aseguraron los médicos. Por este motivo, para las personas con alergias o problemas respiratorios, incluso es recomendable cambiar las sábanas cada 5 días.
¿Cómo lavar las sábanas?
La temperatura del agua utilizada para lavar las sábanas es otro factor importante. Los expertos Sleep Health Network de recomiendan utilizarla caliente, alrededor de 60° C, para eliminar con eficacia los gérmenes y bacterias. El uso de un jabón suave también es crucial para evitar irritaciones en la piel, sobre todo para aquellos con piel sensible.
Otro detalle a tener en cuenta es la recomendación de ventilar la cama diariamente y evitar acostarse con ropa sucia o después de haber transpirado, ya que esto prolongará la limpieza de las sábanas y contribuirá a un descanso más saludable.
De esta forma, hay varios factores a tener en cuenta a la hora de cambiar las sábanas. El clima, la humedad, si la persona se encuentra enferma y el estado general de las mismas. Pero lo importante es no desestimar la importancia de esta acción, ya que una mala higiene puede afectar el descanso y la salud.