Los gatos son animales independientes y no tan sociables como los perros. Ellos necesitan su espacio y tiempo para no estresarse.
Aunque se cree que los mimos en exceso pueden ponerlos de mal humor, los especialistas en comportamiento animal aseguran que hay otros factores que influyen en su comportamiento.
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De esta forma, indican que la falta de control en su entorno puede hacerlos sentir incómodos y en consecuencia, estresados.

Qué estresa a tu gato. (Foto: Adobe Stock).
Cuál es la clave para mantener a tu gato feliz
La clave para mantener a tu gato feliz y saludable es entender qué lo estresa y cómo evitar esos factores que alteran su bienestar emocional. Aunque cada gato es diferente, hay ciertas cosas comunes que suelen generarles incomodidad:
- Cambios en su entorno: son animales de rutina y se sienten cómodos en ambientes familiares. Los cambios repentinos en su entorno, como mudanzas, la llegada de nuevos muebles o incluso nuevos miembros en la familia (humanos o animales), pueden causarles mucho estrés.
- Exceso de ruidos y ruido constante: tienen un oído muy sensible, y los ruidos fuertes o constantes pueden alterarlos. Los especialistas destacan que los sonidos intensos como los truenos, aspiradoras o incluso las conversaciones ruidosas pueden ser abrumadores para un gato.
- Falta de control sobre su espacio personal: aunque los gatos son sociales, también valoran su independencia y su espacio personal. Las visitas inesperadas o el acercamiento forzado de personas o animales pueden hacer que se sientan amenazados.
- Cambio en su alimentación o rutina: son criaturas de hábitos, y cualquier alteración en su rutina diaria, como cambios en la comida o en el horario de alimentación, puede generarles ansiedad.
- Demasiada manipulación o contacto físico excesivo: a pesar de que muchos gatos disfrutan de la atención y los mimos, el contacto físico excesivo o la manipulación forzada pueden ser una fuente importante de estrés. Los gatos tienen límites muy específicos cuando se trata de caricias, y cuando se sobrepasan, pueden sentirse atrapados o molestos. Es fundamental aprender a leer sus señales y respetar su espacio personal para evitar sobrecargarlos emocionalmente.
- Falta de estimulación y aburrimiento: ellos son cazadores por naturaleza y necesitan estimulación mental y física para estar contentos. El aburrimiento puede generarles frustración y ansiedad. Los especialistas recomiendan ofrecerles juguetes interactivos, rascadores y oportunidades para explorar su entorno de forma segura. Esto no solo les proporciona entretenimiento, sino que también les ayuda a reducir el estrés.
- Visitas al veterinario o cambios en su salud: el estrés relacionado con las visitas al veterinario es común entre los gatos. Estos exámenes médicos, aunque necesarios, pueden causarles una gran incomodidad. Los especialistas sugieren preparar a tu gato para estas visitas de manera gradual y crear una asociación positiva con la transportadora o el carrier para que no lo perciba como algo negativo. Además, cualquier cambio en su salud física, como dolor o malestar, puede generarles estrés adicional, por lo que es importante observar sus hábitos y llevarlos al veterinario ante cualquier signo de enfermedad.