El nene de 9 años que quedó atrapado dentro de un silo en el partido bonaerense de Benito Juárez murió por un “edema cerebral, asfixia mecánica y asfixia por aspiración”, de acuerdo al resultado de la autopsia realizada en la morgue judicial.
El trágico hecho ocurrió el viernes por la tarde, pero se conoció en las últimas horas. Fuentes del caso informaron que había ingresado a la bodega con intenciones de jugar. Poco después, los empleados del lugar comenzaron el llenado del depósito de cereales sin advertir su presencia.
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La víctima fue identificada como Joaquín Caldentey Mentasti, de acuerdo a lo que indicaron medios locales. La zona donde sucedió fue en el establecimiento rural “San Gervasio”, ubicado en el cuartel XI de la ciudad.
En medio de la desesperación, los padres de Joaquín fueron a auxiliarlo y lo llevaron en auto hacia la localidad de Chillar. Al mismo tiempo, pidieron asistencia médica.
En ese momento, una ambulancia de un hospital local se acercó para trasladarlo de urgencia. Sin embargo, a mitad del trayecto, los médicos confirmaron su fallecimiento.
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Luego de las pericias correspondientes, el cuerpo fue trasladado al Hospital Eva Perón de Benito Juárez, donde se le realizó la autopsia que determinó la causa exacta de la muerte.
En el caso, caratulado como “averiguación de causales de muerte”, intervino la Policía de Seguridad Rural. La investigación quedó a cargo del fiscal David Carballo, de la UFI N° 2 del departamento judicial Azul.