El hombre que se metió al lago de Palermo cumplió 24 horas desaparecido y continúa el operativo para rescatarlo. Faltaban minutos para las 14 cuando, el hombre de 42 años, en aparente estado de ebriedad, se quitó las zapatillas y las dejó junto a unos guantes y su billetera en la orilla y se zambulló.
Durante este martes, los buzos especializados continuaron trabajando en el último punto donde los testigos lo vieron nadar. Es una tarea compleja: el Lago de Regatas tiene tres metros de profundidad y hay muy poca visibilidad debajo del agua.
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En las primeras horas de búsqueda, trabajaron 40 personas en el rescate, pero en esta jornada, el grupo se redujo a 10 especialistas.
Qué se sabe del hombre que se arrojó al lago
Entre las pertenencias del hombre, las autoridades encontraron una denuncia de extravío del documento, lo que permitió identificarlo, ubicar un domicilio y contactar a su familia. En las últimas horas, su padre y hermanos están en el lugar a la espera de cualquier información y tienen la contención de un equipo de psicólogos del SAME.
Según pudo saber TN, los parientes del hombre habían perdido contacto con él; solo sabían que estaba en situación de calle porque algunos vecinos lo habían visto deambular por la avenida Libertador y Olleros.
Tras la llamada de emergencia, el personal de la comisaría vecinal 14-C de la Policía de la Ciudad se acercó de inmediato al lugar junto con buzos del Grupo Especial de Rescate (GER), una división de los Bomberos especializada en el hallazgo de personas en ámbitos acuáticos, más el apoyo de otro equipo de profesionales que presta asistencia con un kayak en la superficie.
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Este lunes, el titular del SAME, Alberto Crescenti, explicó a TN la dificultad que representa el operativo. “La profundidad del lugar son dos metros y medio y hay muchas algas que se enredan. Es peligroso, por eso no hay que entrar al agua en este lugar porque las algas son las que traban miembros inferiores y después no se puede salir”, dijo.