Sam Cox, conocido artísticamente como Mr. Doodle, convirtió su hogar en un lienzo. Lo que comenzó como un sueño de infancia se materializó en una casa completamente intervenida con su característico estilo de garabatos monocromáticos. Situada en Kent, Reino Unido, la propiedad, ahora apodada “Doodle House”, no solo es una obra de arte, sino también un activo valuado en aproximadamente 1,5 millones de dólares.
La pasión de Sam Cox por dibujar comenzó desde sus primeros años de vida, en gran parte al rol que sus padres tuvieron durante su infancia en St. Michael’s, cerca de Tenterden. “Desde niño, soñaba con tener una casa completamente cubierta de mis garabatos. Mis padres me permitieron dibujar en las paredes de mi habitación y eso marcó mi camino”, explicó en una entrevista con Great British Life. Sin saberlo, comenzaba a desarrollar un estilo artístico único que, años después, sería reconocido mundialmente.
Mientras estudiaba en la secundaria, sus maestros lo alentaron para que perfeccionara su talento. Morgan Davies, su profesor de arte, organizó su primera exhibición de arte en 2012, donde mostró por primera vez las obras creadas bajo su seudónimo, Mr. Doodle. Ese fue solo el comienzo de una trayectoria que solo iría en ascenso.
El comienzo del proyecto Doodle House, una casa repleta de garabatos y más de 1300 latas de pintura
En 2019, Cox adquirió una propiedad en una zona aislada de Kent. La ubicación fue cuidadosamente seleccionada para evitar problemas con vecinos y tener la libertad de intervenir tanto el interior como el exterior de la casa. “Quería un lugar tranquilo, donde pudiera trabajar sin interrupciones y dar rienda suelta a mi imaginación”, comentó en diálogo con la BBC.
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El proyecto comenzó en 2020, durante el aislamiento provocado por la pandemia de coronavirus. Con tanto tiempo libre encerrado en esa vivienda, decidió comenzar a dibujar un rincón de su habitación. Poco a poco, la superficie intervenida comenzó a extenderse por todas las paredes de la propiedad. “Es un proyecto que soñé desde niño y que finalmente pude hacer realidad. Todo lo que he hecho en mi carrera me llevó a este momento”, escribió en su cuenta de Instagram.
Antes de comenzar con los garabatos, dedicó un año completo a preparar la casa. Con la ayuda de su tío Graham, removió muebles, cuadros y cualquier elemento que obstaculizara la pared, para así crear un lienzo completamente blanco. Una vez listo, comenzó la intervención artística, que tomó dos años y una gran cantidad de materiales: 900 litros de pintura blanca para las bases, 401 latas de pintura en aerosol negra para el exterior, 286 botellas de tinta negra para los interiores y 2296 pinceles.
El incremento del valor de la casa
Aunque el objetivo de Cox era cumplir su sueño de la infancia, el proyecto también tuvo un impacto significativo en el valor de la propiedad. Según especialistas en bienes raíces, la Doodle House ahora está valorada en 1,5 millones de dólares. “Mi intención nunca fue aumentar el valor de la casa, pero me alegra que mi arte haya tenido este efecto”, señaló.
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Ese incremento en el precio de la vivienda no solo se debe al resultado final del proyecto artístico, sino también a la popularidad del creador. Sin ir más lejos, Sam Cox fue clasificado en 2020 como el quinto artista menor de 40 años más exitoso en subastas, según datos recopilados por la BBC. Su obra “Primavera” (2019) se vendió por casi un millón de dólares en una subasta en Tokio.
Lejos de vender la casa, Cox actualmente vive allí junto a su esposa, conocida como Mrs. Doodle, y su hijo recién nacido, además de su perro Joey. Aunque muchos podrían pensar que vivir rodeado de garabatos es abrumadora, él aseguró que el ambiente es relajante. “Encuentro este espacio muy calmante, y mi esposa siente lo mismo. Nos preguntamos si nuestro hijo crecerá inspirado por los garabatos o si, al contrario, se convertirá en un amante del minimalismo. Solo el tiempo lo dirá”, señaló.
