La naranja es una de las frutas más elegidas por los argentinos, ya que puede ser utilizada en diversas opciones como jugos, postres, pasteles y demás. Existe una forma de guardarlas adecuadamente para extender su duración y evitar que se pudran rápidamente.
Hasta el momento en que deciden consumirlas, muchas personas optan por dejarlas en el frutero para que esté al alcance de la mano o directamente guardarlas en la heladera, aunque ninguna de estas dos opciones es aconsejable.
Leé también: Ni en la heladera ni en el frutero: ¿Cuál es el lugar ideal para guardar los tomates y que no se pudran?
Para que no se echen a perder rápidamente, lo ideal es conservar las naranjas en un lugar seco y fresco, donde no esté en contacto con la humedad ni los cambios bruscos de temperatura. Evitá colocarlas una encima de la otra y ponerlas en la heladera, ya que el frío puede afectar su sabor.
Un tip imperdible para que duren más tiempo es usar un cartón debajo para que absorba la humedad. Es importante que tires las naranjas en mal estado, con hongos y moho, ya que los microorganismos pueden pasar a la de al lado y así sucesivamente.
No laves las naranjas hasta el momento de consumirlas
En caso de querer conservar la fruta por más tiempo, es importante que no la laves hasta el momento de comerla, ya que podría acelerar su proceso de descomposición. Optá por usar un paño seco para quitar el polvo o la suciedad al momento de guardarla.
El truco especial para elegir las naranjas más dulces y jugosas
La naranja es una de las frutas más consumidas del mundo y se la puede comer directamente o para jugo. Repleta de vitamina C y antioxidantes, la naranja es rica en nutrientes y diferentes vegetales protectores. Y se demostró que consumir cítricos ayuda a reducir el riesgo de padecer afecciones como las enfermedades cardíacas.
A la hora de elegir las mejores naranjas, el truco no está en simplemente seleccionar las que no tienen ninguna imperfección. Las naranjas más ricas, sea cual sea su variedad, son firmes, llenas de color, suaves y de una cáscara un tanto fina.
Leé también: Por qué las cáscaras de naranja son importantes para el cuidado de tu patio
La naranja tiene que ser de un color brillante, de un tono naranja intenso y sólido. De lo que no hay que preocuparse es de si la naranja tiene algunas manchas. El peso también es un factor determinante. Al levantar la naranja, hay que sentir una buena cantidad de peso en la mano.
