Los cordobeses fueron testigos de un fenómeno sorprendente durante la tarde de este viernes. Miles de langostas sobrevolaron la ciudad, formando nubes oscuras que fueron capturadas por los teléfonos celulares de los vecinos. Se trata de la especie Schistocerca cancellata, conocidas como langostas sudamericanas.
Esta plaga había afectado en los últimos días a algunas localidades del interior de la provincia y ayer llegaron a la capital. Desde el Gobierno transmitieron tranquilidad a la población en un comunicado, pidieron paciencia y detallaron que están trabajando para contener la plaga, aunque hay dos mangas sin control en la zona.
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“Nuestro objetivo es claro y contamos con las condiciones necesarias para controlar esta plaga. Seguiremos trabajando de manera coordinada para proteger nuestros recursos naturales y la producción agrícola”, dijo Héctor Medina, ingeniero Agrónomo y Coordinador General de Contingencias y Emergencias de SENASA.
Por qué ocurrió la invasión de langostas
La gran cantidad de langostas que aparecieron en Córdoba este viernes son parte de un fenómeno migratorio denominado “manga”, en el que los insectos vuelan juntos para alimentarse y reproducirse. Esto ocurre cada año, sólo que varía la cantidad y esta vez se hicieron notar.
Medina estimó que inicialmente se enfrentaron entre 30 y 40 mangas. Pudieron contener a la mayoría de ellas, pero aún quedan tres sin controlar, de las cuáles dos están en la Capital.
“Aunque el riesgo para el agro es potencial, actualmente las langostas se están alimentando de la vegetación natural y no están perjudicando la producción agrícola”, informaron desde el Ministerio de Bioagroindustria de la provincia.
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Por su parte, el secretario de Agricultura y Recursos Naturales, Marcos Blanda, señaló: “Las mangas de langostas se han desplazado desde Candonga y El Sauce hacia el dique La Quebrada, con algunas poblaciones menores rezagadas. En Punilla, la manga se ha movido hacia la proximidad del dique San Roque. Esperamos que las condiciones climáticas y los vientos provenientes del norte provoquen un desplazamiento hacia el sur, lo cual nos permitirá un seguimiento continuo y un eventual control”.
Blanda explicó en Telenoche que la repentina aparición de estos insectos en la capital ocurrió debido al viento sur que sopló desde La Rioja y Catamarca, entre otros factores. También explicó que la zona urbana no se su hábitat natural, lo que hizo que su permanencia sea muy breve y afirmó que la mayoría ya se retiró.
Desde el Gobierno de Córdoba pidieron paciencia a la población y explicaron que el control es “más complejo” cuando los insectos se encuentran en pleno vuelo. “Es necesario esperar a que se asienten para poder aplicar medidas efectivas siguiendo protocolos que resguarden a las personas, el agua y las abejas”, dijeron desde el Ejecutivo provincial.
