Christine Baranski es una actriz que con su sola presencia irradia elegancia y sofisticación. Es una mujer de rara belleza, en principio elegante y sofisticada en todos sus papeles, pero también, según el caso, luce otros rasgos que la hacen única. En Cybill, una creación del gran Chuck Lorre, es la mejor amiga de Cybill Shepherd, la protagonista; además de su natural distinción es millonaria y fuerte bebedora.
En The Good Wife es una de las socias principales del estudio donde trabaja Julianna Margulies. En ese papel es una brillante abogada y talentosa negociadora. Su vestuario en esa serie es un exquisito desfile de equipos de alta gama, lujosos y austeros al mismo tiempo.
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Puede ser una severa científica como la madre de Leonard Hofstadter en otra creación de Chuck Lorre, The Big Bang Theory. Con anteojos y sin sonrisas, logra dar miedo con su cruel sinceridad.
Baranski hace un papel diferente en La edad dorada (The Gilded Age) de Julian Fellowes, el creador de Downton Abbey. Ella es Agnes Van Rhijn, perteneciente a la alta sociedad de Nueva York en los años 1880, muy molesta con sus vecinos que se abren paso en la ciudad con la fuerza de su dinero nuevo.
El vestuario de esta serie sugiere una opinión de Fellowes sobre los Estados Unidos. La ropa de las mujeres en Downton Abbey es bellísima y tan vigente que podría usarse hoy. Pero los vestidos en The Gilded Age, con unas pocas excepciones, llegan al borde del ridículo.
Christine Baranski se ríe de la opinión general acerca de su distinción. “Tendrían que verme cuando juegan los Buffalo Bills”, comentó. Ella nació en Búfalo (Nueva York) y naturalmente ése es su cuadro de fútbol americano favorito. Baranski es de origen polaco: sus abuelos eran actores de teatro en Polonia y ella creció muy involucrada en esa cultura. Y entusiasmada desde muy chica con la actuación.
Estudió en una escuela católica y fue presidenta de su clase durante cuatro años seguidos. Y cuando comenzó a actuar siempre tuvo el papel principal. Por ejemplo, hizo Mame. En 1970 se postuló para entrar en la prestigiosa Escuela Juilliard para estudiar drama. La aceptaron, pero tuvo que corregir algunos detalles de su pronunciación, como una S sibilante y algún acento.
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Christine Baranski ha forjado una importante carrera en cine, teatro y televisión. Pasan los años y las ofertas de trabajo siguen llegando. Pronto se estrena la tercera temporada de The Gilded Age y la lista de sus películas es demasiado extensa como para reproducirla acá. En todos los casos, y aunque a ella le cause gracia, transmite elegancia y sofisticación.
