Telenoche siempre cubre los llamados rebusques que ocurren en Capital Federal y el conurbano bonaerense. Esta vez, el rebusque es para esparcimiento. El zoológico de Luján está cerrado, pero todos los fines de semana, las familias se juntan a ver a los animales desde afuera.
El alambrado define el perímetro del predio, es la ventana por la que ven a las especies que aún siguen allí. “Venimos todos los fines de semana con mi familia, es algo distinto para hacer y no tiene costo. Gasté la nafta para venir hasta acá nomás”, dijo un padre de familia que estaba observando a los cuervos.
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“Llevarlos al circo o al cine sale 10 lucas; acá, es cero”, confió entre risas otro papá. La realidad es que en estos tiempos, el rebusque llega también a la diversión familiar.
La mayor atracción es, como en todo zoológico, la jaula de los leones. Todos atraviesan la cortina que forman los eucaliptos para acceder al tejido de donde se tiene una vista privilegiada de estas fieras.
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Aunque el espacio se mantenga cerrado al público, familias enteras siguen acercándose a la colectora del acceso oeste cada fin de semana y viven esta experiencia criticada por algunos y aceptada por otros.