Puerto Madero se caracteriza por su modernidad y la cantidad de edificios y construcciones nuevas pero además, tiene una serie de atracciones que resultan divertidas e interesantes para pasar una linda tarde en Buenos Aires.
La zona, luego de que fracasara el proyecto de Eduardo Madero a principios del Siglo XX, quedó totalmente abandonada durante muchas décadas. Hasta que, finalmente, fue reconstruida entre fines de los 80 y principios de los 90, época en que más se apostó a la zona y se convirtió en uno de los barrios más caros de la Ciudad.
La reconstrucción incluyó más tarde una Polo Gastronómico en la zona en que antiguamente funcionaban los depósitos, y edificios con construcción tipo loft y oficinas. En el trazado del barrio se incluyeron bellos boulevares y callecitas pequeñas para pasear y circular, además de algunos parques y museos.
Treinta de las calles del barrio llevan nombres de mujeres, entre ellas, está el de la Madre de Plaza de Mayo, Azucena Villaflor; Juana Manso, Olga Cossettini y Alicia Moreau de Justo. En todos los casos, son luchadoras y revolucionarias defensoras de la libertad, la igualdad y la independencia.
Paseos
Uno de ellos es el museo ARA Fragata Sarmiento con el que nos podemos encontrar apenas ingresamos a las orillas del puerto. La nave fue bautizada así en honor a Domingo Faustino Sarmiento, que fue fundador de la Escuela Naval Argentina. Llevó a cabo 37 viajes alrededor del mundo y hasta 1960 realizó prácticas solo nacionales. También por la zona está el buque Museo Corbeta Uruguay que se puede recorrer si son fanáticos de los barcos.
Pero si entramos un poco más con ojos curiosos para conocer la zona, nos encontramos con el Museo de Calcos y Escultura Comparada “Ernesto La Cárcova”, considerado el más importante en este género en toda América del Sur. El lugar exhibe piezas de esculturas de la cultura sumeria hasta el Renacimiento y cuenta con reproducciones de obras de la América Prehispánica, además de una colección de esculturas originales de artistas argentinos.
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Otra belleza que se encuentra en la zona es la Fuente de las Nereidas, una obra de la argentina Lola Mora que se inauguró en 1903 y que fue pensada originalmente para ser instalada en Plaza de Mayo. Se la consideró “indecorosa”, por lo que luego estuvo en Perón y Alem y más adelante se la ubicó en la zona de la Costanera Sur.
Está construida en mármol blanco de Carrara. La fuente consiste en una enorme valva, de la que emergen tres tritones con sus caballos. En el centro, dos nereidas sostienen una valva más pequeña de la que surge, triunfal, Venus.
Por la zona está también la obra de la escultora Estela Trebino y el ingeniero Alejandro Coria: Monumento al Tango, que rinde homenaje al género musical más emblemático de Buenos Aires. La obra fue inaugurada el 22 de noviembre de 2007 y se trata de una figura con forma de fuelle que supera los tres metros de altura.
El Parque Micaela Bastidas se caracteriza por un gran paseo elevado sobre un terraplén con escalinatas que lo recorre, a lo largo del cual se articulan distintos sectores, como un rosedal, un área para deportes y una plaza de juegos infantiles.
El precioso parque tiene ocho hectáreas y más de 40.000 árboles y arbustos, que miles de familias disfrutan durante todo el año.