El zoológico de Florencio Varela deberá pagarle una multa de 101 millones de pesos a la familia de Melisa Noelia Casco, la joven empleada que murió hace 13 años cuando entró a la jaula del oso hormiguero para alimentarlo y el animal la atacó. Así lo dispuso el reciente fallo del Tribunal de Trabajo N° 2 de La Plata, firmado por los jueces Carlos Mariano Núñez, Juan Ignacio Orsini y Julio César Elorriaga.
Melisa había entrado a trabajar al establecimiento de la avenida López Escribano al 800 en 2005 como “guía educativa”. Dos años después pasó a ser cuidadora de animales sin haber sido capacitada. El 10 de abril del 2007, apenas 3 meses después de su cambio de función, fue a alimentar a “Ramón”, sola, sin ropa de seguridad y sin handy ni silbato. El animal, que era agresivo, pesaba más de 50 kilos y medía más de dos metros desde el hocico a la cola, la atacó y le provocó graves heridas en las piernas, los brazos, el torso y el abdomen.
La víctima murió dos días después del ataque en el Hospital Evita Pueblo, pero los dueños del zoológico no se hicieron responsables por lo que le había ocurrido. De hecho, la culparon a ella de su propia muerte alegando que “se expuso indebidamente, sin autorización de su empleadora”.
El parque cerró sus puertas en 2016, después de que su propietario, Claudio Alejandro Quagliata fuera condenado a 3 años de prisión en suspenso y 7 años de inhabilitación para estar en cualquier sociedad relacionada a los zoológicos, por “homicidio culposo”, según lo determinó entonces el Juzgado en lo Correccional N° 5 de Quilmes. Ocho meses más tarde, la Cámara de Apelaciones en lo Criminal y Correccional de Quilmes revocó la sentencia y lo absolvió.
Cuando ya se cumplieron 13 años desde la muerte de Melisa, la Justicia hizo un nuevo pronunciamiento sobre el caso y ahora condenó a los responsables a pagarle una millonaria indemnización a la familia de la joven, que tenía 19 cuando ocurrieron los hechos.
El abogado de la familia Casco, Fernando Burlando, quien trabajó en el caso junto con su par Alberto Couyoupetrou sostuvo que “estos son los actos que a uno le generan esperanza” y que “es la primera vez que un tribunal, en 12 años, le dio una respuesta” a los padres de Melisa, Eduardo Alberto Casco, quien padece depresión reactiva crónica por el episodio, y Marta Susana Lago.
“Estimo que, con la prueba producida en la causa, quedó claramente acreditado que la empleadora vulneró el deber de seguridad e incurrió en una conducta negligente causalmente vinculada con el accidente que le costó la vida a la joven Melisa Casco”, explicó el fallo, que fue difundido por el portal Data Judicial, y a su vez rechazó la demanda que habían entablado contra la Municipalidad de Florencio Varela, que le había otorgado la concesión del predio al empresario Quagliata.