La tragedia volvió a golpear a la familia Vargas. Este viernes murió por coronavirus Juan José, el papá de Natalia, la joven que cayó desde un parapente en Tucumán en 2017 y no logró sobrevivir.
El hombre, de 54 años, era concejal por Concepción y presidente del Rotary Club. Desde hacía seis días estaba internado en terapia intensiva y no pudo vencer al Covid-19.
Según informó el diario La Gaceta, en plena pandemia, Vargas había puesto en marcha el Programa “Vecinos en Alerta”, una herramienta para combatir la delincuencia. "Esta acción ojalá motive al departamento ejecutivo municipal y contagie a nuestros pares en el Concejo Deliberante para que entre todos podamos ayudar a brindar más seguridad a los vecinos”, dijo en aquella oportunidad.
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La trágica muerte de su hija Natalia
Natalia era médica y vivía en Alemania. Había vuelto a la Argentina para celebrar las fiestas con su familia. El vuelo en el parapente fue el 29 de diciembre de 2017. El cuerpo de la joven fue encontrado al día siguiente, tras un operativo de búsqueda en medio de la vegetación a 200 metros de la pista de despegue que se localiza en Loma Bola, en el cerro San Javier.
Por el hecho un mes después fue detenido Ariel Salazar, el piloto que la llevó en el vuelo biplaza que le costó la vida a la chica. Diego López Avila, el fiscal a cargo de la causa cree que Salazar quiere ocultar una cámara GoPro y la tarjeta de memoria que contiene el video del vuelo con Natalia. Por eso, lo acusa de obstruir la investigación.
Mientras el instructor Ariel Salazar, negaba la existencia de una GoPro que podría mostrar los últimos minutos de Vargas con vida, varios testigos aseguraron que la médica sí llevaba una cámara al despegar.
Una semana después del accidente, apareció un video que demuestra que tenía puesta una cámara GoPro antes de despegar. “La cámara existe, se la ve claramente en el video que fue difundido. Natalia no la sostenía, así que no se puede haber caído. Iba agarrada al equipo de vuelo”, aseguró Leandro Amar, un amigo de la víctima que estaba presente en el momento del despegue. En diálogo con el diario La Gaceta contó después del accidente “hubo al menos una hora en la que cualquiera pudo haber bajado”.
Por su parte, desde la Federación Argentina de Vuelo Libre (FAVL), informaron que Salazar no contaba con la licencia que expide esta Federación para el ejercicio de los vuelos en parapente.
