Se vivieron momentos de máxima tensión y estrategia en el último capítulo de Survivor: Expedición Robinson (Telefe). La noche de eliminación se calentó desde antes de la votación, cuando un cruce entre Aixa, Eugenia y Mauro sacó a la luz viejas tensiones.
“Nunca pensé que Eugenia, la persona más cercana, me traicionaría”, lanzó Mauro, mientras que Eugenia se defendió diciendo: “Ellos nunca me preguntaron por qué lo hice”, en referencia a su voto que perjudicó a Francisco Pardo la semana anterior.
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Con un clima cargado de intrigas, Marley dio paso a la votación, pero fue Baltasar quien dejó a todos sin palabras al sacar algo de su bolsillo, haciendo creer que tenía el voto doble. “Va con el voto doble”, alertó Martina, mientras los jugadores empezaban a ajustar sus estrategias de último momento.
Pero todo fue una farsa. Baltasar miró a cámara y con una sonrisa pícara dijo: “Ah, ¿pensaron que iba a sacar algo, no?”, desatando la confusión entre sus compañeros.
Cuando llegó el momento de jugar el ídolo de inmunidad, Mauro tomó una decisión crucial. Aunque podía haberlo usado para salvarse a sí mismo, prefirió jugárselo a Baltasar, confiando en que todos habían votado por él.
“Perfecto, todos los votos para Baltasar no cuentan”, confirmó Marley, y las caras de los jugadores que conspiraban contra él se transformaron de inmediato.
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El giro fue decisivo: Malena se convirtió en la eliminada de la noche. Entre lágrimas, intentó explicar el caos que generó el voto doble inexistente: “Fue un error de conteo... pero puede pasar”, dijo, mientras Marley aclaraba que solo había nueve votos.
Finalmente, Baltasar, con su ingeniosa jugada de la media en el bolsillo, fue quien terminó salvándose, provocando carcajadas entre los jugadores. “Era otra noche y una media cambió el destino del juego”, resumió Marley, visiblemente sorprendido.
