Mauro Viale murió el domingo 11 de abril en Los Arcos de Palermo, donde había sido internado luego de un cuadro febril alto. A pesar de que se sentía muy mal, el viernes anterior había ido a conducir su programa, pero al regresar a su casa sus familiares notaron que no estaba nada bien y no tardaron en sospechar que podría tener coronavirus. No se equivocaron.
Al llegar al centro médico su test dio positivo. Además le detectaron una neumonía bilateral. A tres meses de su partida, su esposa habló por primera vez y se emocionó al dar detalles de cómo intenta salir adelante sin su compañía.
“El duelo se hace recordando cada uno de los momentos vividos, de los mejores, para poder conservarlos en el interior y recrear eso que él nos dio, que fue fuente de amor y protección, yo me llevé todo el amor de Mauro, mis hijos también, por supuesto, el amor de papá, y él les transmitió esa pasión por el trabajo que se nota en la actividad que ejercen ambos, tanto Jonatan e Ivanna, que está en radio Rivadavia, que le dejaron el programa con el mismo nombre y lo hace de forma maravillosa”, reflexionó en diálogo con Tomás Dente en el programa Vino para vos.
Leonor Schwadron reconoció que su matrimonio con el prestigioso periodista fue de mucho amor y respeto: “Nos hemos cuidado el uno al otro, recíprocamente. Cuando uno firma ante la ley firma que cuida a su pareja en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza, y se dio un cumplimiento de la legalidad de esa firma a rajatabla”.
“Para él, la familia fue la base de sustentación de todo lo que fue la lucha por la vida. Primero sus hijos, luego sus nietos y la familia. Él le dedicó la vida a su familia”, insistió la mujer, que concluyó su relato contando que según la tradición judía “no está permitido más de un año tanto sufrimiento”.
Cómo fueron las últimas horas de Mauro Viale
El conductor tenía 73 años y se había dado la primera dosis de la vacuna contra el coronavirus 48 horas antes de conocer que estaba infectado. “Hoy fui a vacunarme y lo primero que hicieron fue tomarme la temperatura. Ahí me avisaron que podía llegar a darme fiebre”, había relatado al aire de su programa.
Mauro se había mostrado muy tranquilo porque no había levantado fiebre de manera inmediata. Pero esa alegría no tardaría en dar un vuelco inesperado. Pese a que sus compañeros le aconsejaron que descansara en su casa, decidió estar al frente de su ciclo el día viernes 9 de abril.
Algunos de sus compañeros aseguraron que ese día se lo vio errático y muy cansado durante las pautas comerciales. “Se agarró de la pared cuando se quiso levantar y eso nos pareció muy raro. Le pregunté como estaba y no quiso decirme”, sostuvo la periodista Liliana Caruso al aire de A24.
Ese malestar sería una señal. Horas más tarde, a la salida del canal, como consecuencia de las complicaciones que el virus generó en su organismo, ingresaría a la terapia intensiva del Sanatorio de Los Arcos. En primera instancia, estuvo con una fuerte fiebre y respondió de buena manera al tratamiento, por lo que decidieron pasarlo a una sala común. Pero luego todo se complicó: sufrió un paro cardíaco.