Solo dos oraciones hicieron falta para resumir el cariño que ese chico, que dejaba de ser un nene, le tenía a su juguete. "Él va a estar siempre para vos, no importa qué pase. ¿Me prometés que lo vas a cuidar?", le dijo Andy a Bonnie, sobre Woody, que ya dejaba de ser suyo. Esos segundos fueron los más emotivos de toda la saga de una de las películas más importantes de Pixar. Toy Story 3 cumplió 10 años, y aunque hubo una cuarta parte, este film será siempre recordado como el fin de una etapa.
La única razón por la que los creadores no terminaron la historia de Andy y sus juguetes en la tercera parte fue económica. Toy Story 3 fue un boom de taquilla a partir de su estreno el 17 de junio de 2010: de acuerdo al sitio Box Mojo Office, con un costo de 200 millones de dólares recaudó más de 1 millones en todo el mundo.
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Con ese éxito entre las manos, Disney y Pixar ampliaron las aventuras a tres cortos más, dos especiales televisivos y una cuarta parte en el cine.
El equipo que estuvo detrás venía con buenos antecedentes hasta ese momento. El director Lee Unkrich había colaborado en Buscando a Nemo, Monster Inc. y Toy Story 2. Los dos guionistas, por su parte, también tenían un recorrido prestigioso: John Lasseter fue el director de las primeras dos Toy Story y Cars, mientras que Andrew Stanton venía de haber hecho Wall-E.
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Hay dos ejes en Toy Story 3. Por un lado, el encierro en un jardín de infantes por parte de los juguetes. Por el otro, el intento de escape, en medio de un contexto muy emotivo en el que Andy, el protagonista, se desprende de su pasado infantil para ir a la universidad. "Hay un montón de películas de cárceles y creo que vimos cada una de ellas", contó Unkrich, de acuerdo al sitio IMDB, sobre la base en la que se inspiraron los realizadores.
La trama recorre lo que le pasa a los juguetes encabezados por Woody y Buzz Lightyear, que por diferentes circunstancias, quedan atrapados en la guardería Sunnyside. Cuando se dan cuenta de que quienes caen en ese lugar son manipulados por el oso Lotso, que parece bueno pero es un villano sin corazón, hacen todo lo posible para salir de allí.
Toy Story 3 funciona como un espejo invertido de la aventura inicial: mientras que en la primera todo pasaba por mantener resguardada la inocencia de la infancia, sin que Andy se diera cuenta de que los juguetes tenían vida, el protagonista ahora tiene que iniciar otro camino.
Las imágenes iniciales y finales de lo que debió ser una trilogía exponen el espíritu esencial de la historia. Mientras que en la primera Andy juega solo en su habitación empapelada con un dibujo del cielo azul y las nubes, en el epílogo final juega con esos mismos amigos que ya no son más de él, sino de Bonnie, con el verdadero cielo azul con nubes blancas como el testigo de ese nuevo camino.
