Carlos Villagrán fue parte de uno de los mayores éxitos de la televisión, El Chavo del 8. El actor logró fama internacional y una gran fortuna después de interpretar a Quico en el programa humorístico. Aunque pasaron más de 40 años de su estreno, las repeticiones aún siguen siendo un éxito de audiencia.
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Pese a la popularidad y las ganancias que cosechó con eventos, giras y merchandising, una vez que terminó su participación en el ciclo creado por Chespirito, el artista mexicano tuvo que afrontar serias dificultades financieras. "Dos hombres me propusieron asociarse conmigo para hacer una marca de ropa, que se iba a llamar Quico's Word. La idea era vender en todos los países donde pasaban El Chavo", comenzó narrando en un medio azteca.
Villagrán contó que invirtió mucho dinero en ese proyecto, pero lo perdió todo. "Estos señores se fueron con el dinero. Nunca más aparecieron. Tuve que hipotecar mi casa. La perdí. Me quedé sin nada. Atravesé problemas económicos. Afortunadamente, gracias a Dios, con el tiempo pude recuperarme y salir adelante", completó.
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El actor recordó que Chespirito decidió sacarlo del programa por celos profesionales. "Quico (fue sacado) porque era un personaje muy querido. Eso empezó a despertar la envidia, el egoísmo, el celo profesional de Roberto Gómez Bolaños. Poco a poco Quico fue robándole popularidad al mismo Chavo. Por esa razón, un día me eliminaron del programa", rememoró.
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Si bien nunca volvió a protagonizar un éxito semejante al de El Chavo del 8, Villagrán encabezó sus propios espectáculos en distintos países y un nuevo programa humorístico. "Con una productora independiente en México, junto a Ramón Valdés, hicimos ¡Ah, qué Kiko!, que fue el último programa en el que Don Ramón trabajó antes de su muerte", concluyó.
