Es una de las escenas más emblemáticas del cine de los años ochenta: Rocky Balboa sobre el ring, frente al soviético Iván Drago, boxeando de visitante, en plena Guerra Fría. Sylvester Stallone coincide en que Rocky IV es una de sus películas favoritas en la famosa saga, sin embargo tiene un recuerdo muy especial sobre los ensayos que se dieron durante el rodaje.
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La anécdota, hasta ahora desconocida, la relató el propio Sly para el sitio Vulture. Mientras ensayaban la coreografía de golpes que debían lanzarse, Stallone le pidió a Dolph Lundgren, el actor sueco que interpretó a Drago, que la violencia fuera lo más verosímil posible.
“Le dije '¿Por qué no lo hacemos? Trata de noquearme, de golpearme lo más fuerte que puedas'. Y lo siguiente que recuerdo es estar a bordo de un avión que me llevaba a una sala de emergencias, donde estuve durante cuatro días con un montón de monjas a mi alrededor”, recordó Stallone, quien también fue director del film.
"Me golpeó tan fuerte que detuvo mi corazón", contó el actor, quien se encuentra promocionando la quinta entrega de Rambo. A pesar de los golpes que le dio filmando Rocky IV, Stallone mantuvo una buena relación con Lundgren, a quien volvió a convocar para filmar juntos en la trilogía The Expendables.
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