Ariel Diwan y Gisela Bernal pusieron fin a su relación en 2015. La separación se produjo en medio de un escándalo. Ese año el productor teatral descubrió que el hijo que tenían en común no era suyo sino de Francisco Delgado. Al poco tiempo, una prueba de ADN demostró que sus sospechas eran ciertas.
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Ahora, la bailarina tendrá que pagarle a su expareja $2 millones por un fallo laboral, que fue favorable para el productor. Según contó el periodista Carlos Monti en Pamela a la tarde, la exprotagonista de Stravaganza le había iniciado un juicio laboral a Diwan -productor de ese espectáculo- tras la ruptura sentimental.
Esa cifra podría acrecentarse ya que Bernal apelará el fallo y, si la Justicia vuelve a hacer caso omiso a su reclamo, tendrá que abonar los costos que implique el proceso legal. "Por ahora son 2 millones de pesos, pero podría aumentar ese monto", advirtió el panelista del ciclo de América.
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"El hijo no es mío. Gisela nos mintió a todos", fue la frase que lanzó Diwan en el living de Intrusos en 2015, que marcó el fin de su relación con la bailarina y una novela que tuvo varios capítulos y parece nunca acabar.