Siguen los problemas para Justin Bieber. Cuando muchos pensaban que su flamante matrimonio con Hailey Baldwin lo ayudaría a sentar cabeza, el astro de la música volvió a sufrir una recaída en su estado de ánimo y decidió internarse para superar un cuadro de depresión. Esta vez, el motivo de su malestar no fueron las drogas o algún cuadro de estrés laboral, sino una profunda angustia vinculada a su historia personal, y el nombre que aparece sobre el horizonte es el de Selena Gómez, la ex del artista.
"Sus emociones son muy viscerales, pero él sabe que este tratamiento, aunque doloroso, es lo que necesita para poder seguir adelante en su vida", le reveló una fuente a la revista People. Según el informe, Bieber está muy enfocado en resolver sus problemas lo más rápido posible. Y la terapia está compuesta tanto por profesionales de la salud como por pastores que lo orientan de manera espiritual. Pero la gran polémica que se despierta entre las seguidoras de Bieber es saber cuál es el verdadero motivo por el que su ídolo está atravesando esta situación. Su sorpresivo casamiento con Hailey Baldwin, en septiembre pasado, a menos de dos meses de comenzar su noviazgo, ¿podría ser la respuesta? "Justin todavía tiene cosas sin resolver del pasado", aseguran desde su entorno.
Durante 2018, mientras la relación entre Justin y Hailey avanzaba, Selena Gómez, ex del cantante, tuvo que internarse por una fuerte crisis emocional. Muchos consideran a la exchica Disney como el verdadero amor de la vida de Bieber, y asocian constantemente lo que hacen uno y otro. Hace un mes, Selena reapareció completamente recuperada y espléndida, ¿será que Justin la extraña? "Los problemas de Justin no tienen nada que ver con Hailey, él es muy feliz con su reciente matrimonio", afirman desde el entorno del cantante. Habrá que creerles.
