Lola Bezerra se convirtió en mamá de Josefina hace siete meses, y como novedad, es una de las pocas famosas que admitió que volver al peso de antes del parto no le fue tan sencillo. La modelo aumentó 24 kilos durante el embarazo y una vez que nació Josefina se encontró con un cuerpo muy diferente.
"Me agarró mal la depresión posparto, porque encima fue cuando le detectaron a Josefina la displasia de cadera", recordó. La nena ahora está mucho mejor, pero durante los primeros meses tuvo que usar un arnés y fueron días complicados.
"En el embarazo no me cuidé nada. Engordé 24 kilos y eso que soy súper flaquita y chica. Estaba grandota y gorda pero no me importaba nada. Estaba al cuidado de mi hija y no de mi cuerpo", comentó a la revista Paparazzi.
"Recién ahora estoy flaca de nuevo y todavía tengo un poco la panza para afuera. Pero no estoy de acuerdo con las que engordan cinco kilos nada más. Para eso te tenés que matar de hambre, y estás embarazada. ¡Relajate!", exclamó.
"Ahora que soy madre, me siento más sexy, más segura de mi cuerpo y eso es genial", cerró Lola. Las fotos no mienten: está DIVINA. Para todas las recientes mamás: ¡sí, se puede!
