El premio a la “Mejor película de habla no inglesa” comenzó a entregarse en 1956. De las 66 estatuillas, 54 fueron a países europeos. Italia y Francia se ubican a la cabeza con 12 respectivamente.
Aunque lejos, el cine nacional logra con “Relatos Salvajes” su séptima oportunidad. La primera nominación fue para "La Tregua", de Sergio Renán (1974). Basada en una novela de Mario Benedetti, fue protagonizada por Ana María Picchio, Marilina Ross y Héctor Alterio.
Pasó una década, hasta que "Camila", de María Luisa Bemberg, conseguía la segunda candidatura para la ceremonia realizada en 1985. Con Imanol Arias y Susú Pecoraro, relataba la historia del amor prohibido entre un sacerdote Jesuita y una joven de la alta sociedad porteña en tiempos de Juan Manuel de Rosas.
La tercera fue la vencida. Apenas un año más tarde, "La historia oficial" se alzaba con el primer Oscar. Héctor Alterio y Norma Aleandro componían a un feliz matrimonio que adoptaba una hija. Ella, una acomodada profesora de historia, comienza a replantearse la moral de su marido, el origen de esa adopción; en definitiva, empieza a sospechar de "la historia oficial" de los años de dictadura.
Tras el triunfo, pasaron trece largos años hasta que Argentina volviera a ser nominada por la Academia. En 1998, "Tango, no me dejes nunca" quedó nominada. Dirigida por Carlos Saura y protagonizada por Miguel Ángel Solá y Mía Maestro, volvió con las manos vacía, pero la bella y talentosa Mía empezó su camino en Hollywood.
"El Hijo de la Novia", dirigida por Juan José Campanella, consiguió la nominación en 2001 y acarició el premio con una conmovedora interpretación de Norma Aleandro, Ricardo Darín y Héctor Alterio. El filme cuenta la historia de Rafael Belvedere, un hombre agobiado por el trabajo, separado y con poco tiempo para su hija. Pero la decisión de su padre de casarse por Iglesia con su madre, enferma de Alzheimer, lo hará replantear su vida.
"El Secreto de sus Ojos", también de Campanella y con Ricardo Darín, Guillermo Francella y Soledad Villamil cumplió el sueño tan esperado. Después de más de 2 décadas y sin ser favorita, se llevó en 2010 el Oscar. Un funcionario judicial recién jubilado prepara una novela inspirada en el crimen sin resolver de una joven, que él mismo investigó 25 años antes. Ese viaje en el tiempo, lo acercará con el amor de su vida y lo confrontará con un desenlace de ese crimen que no imagina. Adaptación del libro de Eduardo Sacheri, fue también un genial fresco de varias décadas de la vida nacional.
Ahora, es el turno de Relatos Salvajes. ¿Volverá con las manos vacías o traerá el tercer Oscar?