Pese a ser una de las mayores figuras de Hollywood y siempre lucir un impecable estado físico, Brad Pitt reconoció que cambió su alimentación para sentirse mejor.
En el podcast Armchair Expert, de Dax Shepard, recordó que cuando era más joven no tenía ningún interés en mantenerse saludable. “Me despertaba, me ponía una pipa, me tomaba cuatro gaseosas con hielo y nada de comida“, contó en la entrevista.
Leé también: “F1″, la electrizante película sobre el detrás de escena de los corredores con un inoxidable Brad Pitt
Durante un tiempo, siguió una dieta cargada de azúcares que solo perjudicó su salud, pero logró dejarla atrás al notar que su carrera comenzaba a tomar vuelo. Hoy, se arrepiente de haber llegado a ese extremo y considera que lo ideal habría sido incorporar hábitos saludables desde un principio.

“Intento mantenerme en forma, comer sano y ser creativo”, añadió. Además, reveló cuáles son sus principales secretos para cuidar tanto su cuerpo como su mente a los 61 años. “He parado un tiempo, me estoy tomando un descanso autoinducido”, agregó el galán.
Respecto a la alimentación que lleva ahora, Pitt comentó que se alimenta de productos ricos en proteínas magras y grasas saludables, sin descuidar la ingesta de carbohidratos. Sin embargo, hay tres alimentos que son infaltables en su rutina diaria: el pollo, el brócoli y el arroz integral.
Esa alimentación va de la mano con un riguroso plan de entrenamiento personalizado, supervisado al detalle por su entrenador. El actor sigue el método dividido, que le permite trabajar un grupo muscular distinto cada día de la semana, buscando así un equilibrio ideal. Un estilo de vida que lo mantiene en excelente forma.
Brad Pitt contó cómo fue vivir en la Argentina: la comida que extraña y el recuerdo que todavía lo emociona
Semanas atrás, May Martorelli entrevistó para Telenoche (eltrece) a Brad Pitt y a Damson Idris y Kerry Condon, protagonistas de F1: la película, previo a su estreno.
Durante la nota, el actor recordó lo mejor de haber vivido durante cuatro meses en la Argentina en 1996, durante el rodaje de la película Siete años en el Tibet.
“Es un país muy hermoso. La comida y el vino era increíble. Comíamos como reyes”, aseguró.

Luego, explicó en dónde había estado: “Estuve en la falda de Los Andes, en un pueblo pequeño que era increíble. Era tan hermoso ver como el sol cambiaba y como el paisaje cambiaba a lo largo del día. Era un lugar mágico, y después fuimos a Mendoza”.
Acto seguido, May le mostró una foto con un perro que Brad había adoptado durante su estancia en Argentina. Algo emocionado al ver la imagen, dijo: “Estaba en Los Andes. Blanco se llama. Fue muy hermoso. Se parece un poco a un galgo”.