El actor australiano Julian McMahon, reconocido por su trabajo en exitosas series como Nip/Tuck, Charmed y FBI: Most Wanted, murió a los 56 años tras una lucha contra el cáncer.
La triste noticia fue confirmada por su esposa, Kelly McMahon, quien compartió un emotivo comunicado en diálogo con Deadline: “Con el corazón abierto, deseo compartir con el mundo que mi amado esposo, Julian McMahon, falleció en paz esta semana tras un valiente esfuerzo por superar el cáncer”.
Leé también: Murió Michael Madsen, actor de “Kill Bill” y “Perros de la calle”
“Julian amaba la vida, a su familia, a sus amigos, su trabajo y a sus fans. Su mayor deseo era brindar alegría a la mayor cantidad de personas posible. Pedimos respeto para poder atravesar este duelo en privado y deseamos que quienes fueron tocados por su luz, sigan encontrando motivos para sonreír”, sumó.
Quién era Julian McMahon
Nacido el 27 de julio de 1968 en Sídney, Australia, Julian era hijo de Billy McMahon, quien ocupó el cargo de primer ministro australiano entre 1971 y 1972. Antes de iniciar su carrera como actor, incursionó en el modelaje y luego dio el salto a la televisión con un rol protagónico en la telenovela australiana The Power, the Passion (1989). Más tarde integró el elenco de Home and Away, otro clásico de la pantalla chica local.
Su carrera internacional comenzó en 1992 con la comedia Wet and Wild Summer!, donde compartió escenas con Elliott Gould. A partir de allí, se instaló en Estados Unidos y se incorporó al elenco de Another World, una telenovela diurna de NBC, lo que marcó el inicio de su etapa en la televisión norteamericana.
Consolidó su figura como actor en Profiler, drama policial también de NBC, y ganó notoriedad mundial interpretando a Cole Turner, el demonio romántico de Charmed, serie que integró durante tres temporadas. Pero su mayor reconocimiento llegó de la mano del personaje del Dr. Christian Troy en Nip/Tuck, la exitosa serie creada por Ryan Murphy sobre el mundo de la cirugía estética. Su trabajo le valió una nominación al Globo de Oro y el reconocimiento como uno de los rostros más recordados de la televisión de los 2000.
Además, McMahon incursionó en el cine, participando en las películas de Los Cuatro Fantásticos, donde dio vida al villano Doctor Doom.
A lo largo de su carrera, se destacó por su versatilidad, su carisma y su compromiso con cada proyecto. Su legado permanecerá en la memoria de los fanáticos que lo acompañaron en cada etapa de su trayectoria.