Mica Viciconte cumple 36 años este sábado y sus redes sociales se inundaron de saludos y buenos deseos por parte de familiares, amigos, compañeros de trabajo y por supuesto, sus seguidores.
Entre las dedicatorias, destacaron las de sus hijastras Allegra, Sienna e Indiana Cubero, las hijas que comparte su pareja, Fabián Cubero, con Nicole Neumann.
La mayor de las nenas, Indi, escogió una linda foto junto a la rubia y escribió: “Feliz cumple Mica, te quiero”. Esta imagen la acompañó con un emoji de corazón rosa.
Allegra eligió una foto en la que ambas aparecen abrazadas en una fiesta de cumpleaños y decoró con otras fotos superpuestas en forma de corazón. Su mensaje fue exactamente igual al de su hermana mayor.
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La más pequeña, Sienna, compartió en sus redes una divertida foto en la que ambas practicaron kayak. A pie de publicación, le deseó feliz cumpleaños y arrobó a la homenajeada, junto a un emoji de manitos haciendo forma de corazón.
La angustia de Mica Viciconte cuando vio a su hijo de 2 años caer de nuca y sufrir un fuerte golpe
Viciconte mostró el tremendo golpe que sufrió su hijo Luca mientras miraba televisión en el living de la casa con su familia. “Era mi miedo mayor”, aseguró preocupada.
En sus historias de Instagram, compartió la grabación de las cámaras de la casa en las que se ve al nene sentado sobre el respaldo del sillón del living. En un momento, el pequeño atinó a recostarse y cayó de espaldas, al dar una vuelta en el aire.
“Fue solo un susto”, escribió su mamá. Y comentó: “Nunca se había sentado ahí. Después de este golpe no se sienta más”.
Luego de compartir el video, Viciconte mostró una foto del pequeño con una cinta en la frente y contó: “Lo más importante es que él está muy bien. Como dije, fue un susto”.
En otra historia de la red social, en la que reúne más de tres millones y medio de seguidores, la influencer admitió: “Uno de mis mayores miedos como mamá es que a mi hijo le pase algo. Es inevitable... Queremos estar las 24 horas al lado de ellos, cuidándolos, protegiéndolos de todo. Pero la realidad es que no siempre se puede, y eso también está bien”.
“Los chicos se caen, se golpean, se lastiman... y aunque nos duela más a nosotras que a ellos, es parte de crecer. Como mamás hacemos lo mejor que podemos con todo el amor del mundo”, aseguró.
