Noelia Marzol suele ser muy activa en redes y con frecuencia comparte con sus seguidores algunas intimidades familiares, sobre todo, en cuanto a sus experiencias como mamá.
Sin embargo, este viernes, la bailarina fue invitada al ciclo La noche perfecta (eltrece) para conversar sobre su actualidad con el conductor Sebastián Wainraich. Lo que él no esperaba era enterarse por boca de la misma Noe una intimidad sobre sus hábitos higiénicos, específicamente a la hora de ir al baño.
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Previamente, Marzol contaba al presentador que creció rodeada de mucha presencia masculina en su familia, cuestión que influyó en su comportamiento, forma de pensar y de accionar. A modo de chiste, Wainraich respondió “Meas parada” y, lejos de reírse o hacer caso omiso al comentario, confirmó que orina de pie como si fuera un hombre.
Ante la reacción del conductor y el público presente, la morocha se animó a simular sus idas al baño. “Es mucho más simple. Sentarse es como raro, uno nunca sabe bien a dónde cae todo esto”, dijo la modelo. Acto seguido, procedió a levantarse de su asiento para flexionar las rodillas con las piernas separadas frente a un inodoro imaginario: “Le encarás de frente al inodoro y listo”.
Para cerrar el tema, Noe contó qué la hizo modificar sus conductas de higiene. “Siempre me quedé pensando por qué para ustedes es tan sencillo y para nosotras tan rebuscado todo. Varias cosas son más fáciles para los hombres. Básicamente vivir“, concluyó.
Noelia Marzol mostró la carta de amor que su papá le escribió a su marido, Ramiro Arias: “Se pasó de emoción”
Noelia Marzol mostró la carta de amor que su papá le escribió a Ramiro Arias: “Se pasó de emoción”. La bailarina le pidió ayuda a un familiar para sorprender a su marido en San Valentín, pero un detalle la dejó al descubierto.
“JAJAJA Estoy estallada”, comentó en sus historias de Instagram junto a la foto de una carta. Entonces contó: “Le hice un regalo a Ramiro y, como lo mandé a lo de mis viejos para que se lo entreguen (yo estoy en Córdoba), le pedí a mi papá que le escriba una tarjeta con dedicatoria”.

Sin embargo, las cosas no salieron como planeaba. “Pero se pasó de emoción y Rama rápidamente se dio cuenta de que no lo escribí yo”.