Germán Martitegui habló por primera vez sobre la dieta saludable que les hace mantener a sus hijos, Lautaro y Lorenzo, quienes nacieron hace poco más de cinco años. Los temas en los que se centró fueron dos: los hábitos que intenta inculcarle a los nenes y por qué las galletitas son “una droga”.
El exjurado de MasterChef (Telefe) estuvo como invitado en Perros de la calle (Urbana Play 104.3) y Andy Kusnetzoff, conductor del programa, le preguntó: “Lautaro y Lorenzo.... ¿Qué comen? Porque me imagino que hay una coherencia”.
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“Hasta que salieron de casa eran pibes que te identificaban 30 tipos de verduras o porotos distintos”, respondió el empresario gastronómico. Acto seguido, destacó: “Saben el nombre de todo y comen superbien. Les gusta cocinar, comer y probar”.
Luego, aseguró que en los primeros eventos sociales que tuvieron sus hijos fue cuando descubrieron la comida chatarra o no tan saludable: “Una vez que llega el primer cumpleañitos...”. “Claro, descubrieron el chizito, la salchicha”, acotó entre risas Kusnetzoff.
“Este es un llamado para todas las madres y padres de la Argentina: no mandes a los chicos con una caja llena de galletitas compradas”, lanzó Martitegui. Filoso, añadió: “Porque la industria te prepara. Eso va directo al cerebro. Tiene sal, azúcar y grasas saturadas. Es una droga, tiene todo lo que tiene que tener para que te hagas adicto”.
“Bueno. Entonces... ¿Con qué los mandas a los chicos al cumpleaños?”, le consultaron en el ciclo radial. “No, yo no les puedo decir nada”, cerró el cocinero, dando a entender que en esa clase de eventos, sus nenes tienen vía libre para consumir lo que quieran.
Germán Martitegui, un chef todoterreno
Sin duda alguna, Masterchef Celebrity Argentina siempre brindó novedades y divertidas charlas entre los jurados. Una de las primeras fue cuando Damián Betular le echó en cara a Germán Martitegui, dueño entonces del exclusivo restaurante Tegui, que no lo había elegido como chef.
El chico tímido nacido en Necochea el 16 de junio de 1966, que festeja sus 56 años, hizo una gran carrera en la gastronomía gourmet: empezó en el restó del Hotel Boutique La Cascada, de Bariloche, y luego se convirtió en el jefe de cocina de Francis Mallman.
En 2001 instaló su primer restaurante, Olsen, que tiene una filial en Madrid, al que siguieron Casa Cruz en 2004 y Tegui en 2009. A fines de 2021, después de cerrar Tegui, abrió Marti, un restaurante vegetariano en Recoleta. Tanto el chef necochense como sus dos hijos, Lautaro y Lorenzo, nacidos por vientre subrogado, no comen carne porque no aceptan hacer sacrificios animales para alimentarse.
Desde hace casi ocho años, además, el chef recorre el país, cocinando los platos típicos de cada región en La Mesa del Proyecto Tierras. El cocinero, durante mucho tiempo, también se había desempeñado como uno de los jurados de The world’s 50 best restaurants, hasta que renunció sorpresivamente hace poco más de dos años, durante la pandemia. Fue en ese tiempo en el que también presentó a sus hijos, Lorenzo y Lautaro, a los que tuvo a través de la subrogación de vientre y ahora, con cinco años, son quienes ocupan buena parte de su tiempo..
