Javier Parisi se encontró con un disco de The Beatles cuando tenía apenas ocho años. Desde ese momento, su vida hizo un viaje inesperado: no solo es querido por miles de fanáticos de la banda inglesa, sino que además se ganó el cariño de la mismísima familia de John Lennon.
“Todo empezó como un juego”, dice el artista argentino en su entrevista íntima con TN, al recordar el momento en que empezó a imitar a su ídolo. Hoy, es el “Lennon de Lanús” y lleva los colores de su equipo por todo el mundo.
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A sus 44 años, Javier mira su pasado con orgullo y sorpresa. “El colo se parece a Lennon”, le había dicho un compañero del colegio cuando tenía 17. En ese momento, jamás se hubiera imaginado que de más grande recorrería diferentes países interpretando a la perfección las canciones que escuchaba en su casa. Ni mucho menos, teniendo la aceptación y el reconocimiento de la familia de John.
El acercamiento surgió gracias a una gorra. Luego de eso, Parisi pudo merendar con la hermana de su ídolo y hoy en día mantienen un contacto cercano. “Vos cuidás muchísimo al personaje y sabemos que lo querés. No podríamos tener en nuestra casa a un loco que se crea Lennon porque a él lo mató un loco”, fueron las palabras que recibió de Julia cuando la conoció en Inglaterra en el 2019.
En diálogo con TN, Javier recordó los inicios de su fanatismo por los Beatles cuando descubrió el disco A Hard Day´s Night en su infancia. Además, contó cuál es la esquina de Lanús que lo remite a la icónica intersección de Abbey Road y cómo es caminar por su barrio con su inconfundible parecido físico con John.
El personaje que empezó como un juego
En la intimidad de su hogar ubicado en Lanús, rodeado de recuerdos, fotos, recortes de diarios y vinilos, el artista explica que su fanatismo surgió cuando descubrió la canción “Anochecer de un día agitado” como cortina musical de un programa de Pinky. Fue entonces, a sus 8 años, que le dijo a su mamá que quería estudiar guitarra e inglés.
Luego de ese episodio, Javier fue a la casa de un tío y en el tocadiscos encontró el álbum de los Beatles que lleva ese tema, A Hard Day´s Night. Desde pequeño era fanático de la banda inglesa, pero jamás pensó en lo que vendría después. “La primera persona que me dijo que me parecía fue un compañero del colegio, a los 17, cuando en el televisor estaban pasando el video de ‘Something’. Después, comencé a recrearlo cuando tenía entre 20 y 21″, explica.
Fue ese empujón el que llevó a tener una banda tributo a los Beatles con conocidos del barrio. “Trabajaba como cadete y mi norte siempre fue tocar las canciones de ellos. No pensaba vivir de esto, no fui detrás de ese objetivo ni de la fama. Solo quería perfeccionarme y divertirme con amigos”, detalla Parisi y cuenta que en ese momento usaba la plata de ese empleo para equiparse con los instrumentos.
“No lo soñé de la manera en que está sucediendo porque todo comenzó como un juego”, reflexiona Javier. Al preguntarle qué le diría a aquel pequeño de ocho años, el artista se emociona: “Siempre hay que tener motivación y ganas, porque es el motor que va a hacer que consigamos las cosas. Estoy seguro de que ese niño está muy contento por lo que está logrando”.
La gorra que lo unió con la familia Lennon
Fue en diciembre del 2018 que Javier se puso en contacto con Helen Anderson, la amiga íntima del Beatle, porque quería la gorra de cuero que él había usado en 1964. “La pedí y me llegó en una caja hermosa. Había una tarjeta que decía ‘tomate una fotografía y enviámela’. Cuando se la mandé me dijo que me parecía mucho a John, le conté que hacía música y me pidió que le mandara la canción ‘In my life’”, relata él sobre el primer acercamiento con personas allegadas a su ídolo.
Parisi había subido esa imagen con la gorra a su perfil de Instagram y el posteo le llegó nada más y nada menos que al hijo de John, que no solo le comentó ‘I love it’, sino que también lo empezó a seguir. “Ahí surge toda la locura porque al año siguiente tuve la oportunidad de ir a Inglaterra a trabajar en un musical y vivir tres meses en la casa de Helen”, cuenta el artista y recuerda que la hermana de Lennon iba a tomar el té con ellos.
La primera vez que vio a Julia, Javier vivió una experiencia impensada. “Sabía que la iba a ver y no pude pegar un ojo en toda la noche. Fue a la casa de Helen y cuando llegó se me acercó, me miró, me abrió los brazos y nos abrazamos fuerte”, dice él en su charla con TN y detalla el diálogo que tuvieron, el cual tiene presente en su memoria hasta hoy en día.
Mientras le mostraba fotos, la hermana de Lennon le preguntó: “¿Cuándo naciste?”. “En 1980″, respondió Javier. “La fecha en la que mataron a mi hermano”, reaccionó ella y le pidió que le contara de sus padres. “Bueno, mi papá es Roberto y mi mamá Julia”, le dijo él. “Tu mamá se llama Julia como nuestra madre. Ya está, mejor vayamos por otro lado. No quiero seguir indagando ni preguntando más detalles”, expresó la mujer, totalmente conmocionada por las coincidencias que tenía con el hombre nacido en Lanús.
“Ella sentía en cierta manera que el hermano estaba ahí”, reflexiona Parisi por el momento especial que vivió con ella. “Tuve situaciones en las que me decía: ‘Nosotros sabemos que querés muchísimo a John, que trabajas recreándolo y cuidás muchísimo al personaje. Porque nosotros no podríamos tener en nuestra casa a un loco que se crea Lennon, porque a Lennon lo mató un loco también. Sabemos quién sos, que estás con la camiseta de Lanús y que todo el tiempo hablás con tu familia y amigos’”.
Sobre todas estas situaciones que vivió, Javier analizó: “Cuando perdés a una persona muy cercana, tenés la voz y un montón de cosas, pero te falta el contacto físico. Y no solo para ella que es su hermana, sino para personas que tienen a John como ídolo”. Incluso, contó que Julia le había ofrecido ser el embajador de su libro en los países hispanohablantes. “No lo hubiera imaginado, uno sueña a veces, pero los sueños terminan siendo más grandes y a uno eso lo toma de sorpresa. Hay que estar preparado para vivir todo esto, con esta intensidad”, dijo él.
El Lennon de Lanús
“Acá me conocen como el Lennon granate o el Lennon de Lanús y eso está bueno porque es llevar por todo el mundo los colores de esa camiseta que tengo ahí atrás firmada por todos los jugadores”, expresa Javier mientras charla con TN sentado en uno de los sillones del living de su casa. Además, cuenta que es un hincha fiel del club y que se pone “muy nervioso en los partidos”. “Soy una persona muy tranquila pero en la cancha me vuelvo loco. Si tengo un show cercano a algún partido, trato de no mirarlo”, explica también por la euforia que lo atraviesa.
El artista sabe separar su rol como imitador y la vida real. “Yo me miro y soy Javier. No me visto como Lennon con los pantalones Oxford. Después, cuando tengo que recrearlo ahí sí aparece el personaje. Hay personas que se ponen el traje y se disfrazan de oficinistas para ir a trabajar. Bueno, yo me pongo el look de Lennon cuando lo tengo que recrear. El parecido está, con eso no puedo hacer nada”, dijo sobre los increíbles rasgos que comparte con el Beatle.
“Yo soy responsable de portar esta imagen, de parecerme. Entonces no lo padezco ni lo sufro”, aseguró Javier y explicó que es muy importante para él el contacto con el público. “El cariño lo recibo de todas partes del mundo: España, Finlandia, Filipinas, Indonesia, todo Sudamérica y Centroamérica. El amor es maravilloso”, lanzó con orgullo por la cercanía que tiene con los fanáticos.
El Lennon de Lanús también tiene su esquina de Abbey Road. “Mi senda sería la de la Avenida 25 de mayo y la Hipólito Yrigoyen”, cuenta entre risas y recuerda al colectivo de la línea 45 que va a Ciudad Universitaria. “Acá en el barrio la gente me puede confundir con Lenonn o con Jesús”, dijo entre risas por varias situaciones que le pasaron con vecinos de la zona cuando se lo cruzaron caminando por la calle.
“Cuando fui a hacer un depósito, la persona de seguridad del banco me dijo ‘sos la cara de Jesús’”, relató Javier por las situaciones desopilantes que vive. Incluso, cuando sale a comprar con su changuito, algunos se le acercan a decirle que se parece al Beatle, y otros lo reconocen como el doble del músico y le piden selfies. “Son cosas graciosas que me pasan, a mí me gusta y me divierte”, aseguró.
“Les llevo a las personas a alguien que ya no está más físicamente. Está su música y todo su legado, pero lo que yo hago es darle ese plus que la gente quiere ver y después sacarse una foto”, reflexionó Javier por el impacto que tiene en los fanáticos del cantante. “Es muy gratificante y hermoso todo lo que me pasó. No lo soñé de la manera en que está sucediendo, porque todo comenzó como un juego”, repasó con orgullo el artista que lleva la argentinidad por el mundo con su increíble talento y parecido a John Lennon.
Realización y foto: Juan Pablo Chaves
Edición: Berenice Laciar