Este martes al mediodía se realizó la ceremonia de inhumación de los restos de Daniel “La Tota” Santillán, en el Cementerio Las Praderas, en Esteban Echeverría, provincia de Buenos Aires.
En ese contexto, al conductor le cumplieron su última voluntad y enterraron sus restos al lado de su gran amigo, Rodrigo Bueno.
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Ese era el deseo del presentador desde que el cantante de cuarteto perdió la vida el 24 de junio del 2000, cuando tenía tan solo 27 años.
Tras confirmarse la noticia de la muerte de La Tota, su hermano Horacio hizo todo lo posible para concederle su último deseo. Fue así que este mediodía fue inhumado a tan solo metros de donde yacen los restos del artista cordobés.
“Estoy partido. No sé ni a dónde estoy. Es muy feo. Lo único que tengo para decir es que dejémoslo descansar en paz. Hablar de lo que pasó o lo que no, ya está. Por favor, que descanse en paz”, declaró Horacio, sumamente conmovido.
Silvia Süller ventiló un triste dato sobre los últimos meses de La Tota Santillán
La Tota Santillán fue encontrado muerto en su casa de Castelar y nadie puede creerlo. Una de las más impactadas con la noticia fue Silvia Süller, que en un programa de TV ventiló un triste dato que confirma lo mal que la pasó el animador en los últimos meses y años. Según la mediática, todo se debió al conflicto que mantenía con su exmujer, que lo dejó por la mucama.
“Estoy muy triste por la Tota porque era un buen tipo, generoso, ayudaba. La mujer se volvió lesbiana y lo dejó. Se quedó con la mucama y encima nunca más le dejó ver a los hijos, no sé si son dos nenas. ¡Lo que ha sufrido!… Nos pusimos a llorar los dos porque él quería ver a sus hijas y tampoco le entraba en la cabeza que su mujer lo haya dejado por la mucama. Él se empezó a poner mal, entró en depresión y ahí empezó el principio del fin, que fue por su mujer Sol”, se le escuchó decir en LAM (América).
Süller también señaló que hubiese sido bueno que lo invitaran a los Martín Fierro, donde Pasión de Sábado (América) recibió una distinción. “Todos sabían que él no estaba bien. Lo hubieran invitado y lo alegraban un poco. La gente es mala, muy mala. Una vez que te morís, recién se acuerdan de vos y encima hablan pelotudeces”, cerró indignada.