El 19 de septiembre se estrena en todas las salas de cines del país Linda, película dirigida por Mariana Wainstein y protagonizada por La China Suárez, quien encarna a una empleada doméstica que llega a trabajar en la casa de una familia de Zona Norte y despierta un magnetismo un tanto fuera de lo normal.
Consciente de su encanto, maneja discretamente ese poder de seducción con cada uno por separado, pero se va enredando en la atracción y la pena que siente por ellos. Descubre que detrás de esas aparentes vidas felices, hay algo más complejo.
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En diálogo con TN Show, la artista contó qué similitudes y diferencias encontró con su personaje. “No encuentro ninguna similitud con Linda, pero sí me tocaba el tema de la maternidad”, comenzó diciendo durante una conferencia de prensa que brindó.
“Para mí era un personaje en el que se tenía que sentir la empatía con el público, que era algo que me preocupaba al principio, porque yo decía ‘cómo vamos a hacer para que una mujer quizás tan distante al principio, tan fría...’ y Mariana me hablaba del mundo que tenía ella y es verdad. Cuando la película sale del mundo de la casa y van al mundo y al entorno de ella, se entiende perfectamente por qué ella es como es, por qué reacciona como reacciona”, analizó.
Al mismo tiempo, María Eugenia explicó que en verdad Linda termina sufriendo las actitudes de la familia para la que trabaja: “Al principio es medio acosada en la casa. Dicen ‘entra a seducir a todos’... yo lo veo al revés, y creo que también habla del abuso de poder que pasa en muchos lugares, porque ella no tiene opción: necesita el trabajo, es una madre soltera, como la realidad de muchísimas mujeres”.
“Ese tema en particular, el de la maternidad, me tocaba muy, muy profundo, y es con lo que más empaticé”, sentenció Suárez.
La palabra de La China Suárez sobre “Linda”
Por último, contó cómo le llegó la propuesta para ser parte del filme y por qué decidió involucrarse en el proyecto: “Me contaron esta historia y yo al principio no entendía muy bien adónde iba. Todavía no había hablado con Mariana, la directora, y yo pedí y dije ‘que por favor fuera una mujer’ quien la dirigiera porque para mí eran muy importantes las sutilezas y la perspectiva de donde tenía que estar contada y se dio todo como todos queríamos”.