A tres años de la muerte de Diego Maradona, sus hijos lograron dejar las diferencias de lado para luchar juntos de cara al juicio por la muerte del futbolista. En los últimos meses, comenzaron a mostrarse junto en distintos homenajes y eventos, pero ahora una foto dejó al descubierto la verdadera relación entre Dieguito Fernando, Dalma y Gianinna Maradona.
En sus historias de Instagram, Gianinna compartió una imagen en la que se la ve muy sonriente y abrazada al más chico y a la mayor del clan. El detalle fue que, a diferencia de las veces anteriores, esta foto fue tomada en la intimidad familiar y no en el marco de un evento público.
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Durante años, Verónica Ojeda luchó para que su hijo tuviera un contacto directo con sus hermanos. En varias oportunidades reclamó que las hijas de Claudia no lograban separar los problemas ‘de los adultos’ de las necesidades de un niño. Sin embargo, el tiempo hizo que sanaran las diferencias.
Claudia Villafañe recordó la primera reacción que tuvo Dieguito Fernando al conocerla
Claudia Villafañe recordó con humor el primer encuentro con Dieguito Fernando, el hijo que Diego Maradona tuvo con Verónica Ojeda. Durante su paso por Ángel responde (Bondi), el ciclo que conduce Ángel de Brito, Claudia contó cómo fue el primer encuentro con el nene, que ocurrió en 2015 en un sanatorio.
Según relató, en ese momento Maradona estaba de viaje en Dubai y ella fue a la clínica porque su exsuegro había sido internado en estado grave. “Fue en el sanatorio donde estaba internado Don Diego, Diego no había llegado todavía de viaje, que estaba en Dubai. Y yo estaba a cargo de la situación, estábamos esperando en la sala de terapia intensiva afuera, con familiares de todas las personas que estaban internadas”, recordó.
Mientras esperaban, llegó Verónica Ojeda con Dieguito en brazos. “Ella se quedó a un costado y como había más gente, me dije: ‘Claudia, levantate’. Fui a saludar y cuando lo voy a saludar a Dieguito, me encaja un cachetazo”, dijo entre risas al detallar la reacción del nene.
“Era chiquito, era un bebé, tenía dos años, estaba a upa. Lo miré a Dieguito y le dije: ‘Seguramente tu mamá te dijo que si veías a una rubia le pegues’”, aclaró, tomando con humor la inesperada situación. Y sumó: “Lo saludé, me fui a sentar a mi lugar y listo”.
