En septiembre, Germán Martitegui decidió contar que hacía dos meses había sufrido el robo de 500 mil dólares que tenía guardados en la caja fuerte de su casa. Cuando hizo pública la noticia, la Justicia detuvo a la empleada doméstica que trabajaba en su vivienda, pero luego fue liberada por falta de mérito.
En las últimas horas se sumó un nuevo sospechoso y la causa dio un giro inesperado a raíz de una nueva declaración. Fue el periodista Martín Candalaft quien dio las últimas novedades sobre el tema y dijo: “Hace poco se presentó a declarar un contratista, porque Germán estaba realizando remodelaciones en su casa, particularmente en las habitaciones”.
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Acto seguido, el experto en policiales sumó: “Esta persona le dijo al fiscal ‘ahora que recuerdo bien, en esa fecha una empleada doméstica me pidió permiso para entrar al vestidor, que estaba tapado de materiales. Después de unos minutos la empleada se fue con la campera y veo en el piso una carpeta con documentación, al volver le dije a Germán que esta carpeta se cayó'”.
Por último, Candalaft explicó que esta declaración tardía generó sospechas. “Así la Justicia se hace unas preguntas, como por qué el contratista recién lo cuenta ahora. La Justicia se pregunta si puede haber sido la empleada doméstica, lo están investigando. Lo que más llama la atención es que el contratista haya tardado tanto tiempo en contar esto. La pregunta es: ¿el contratista inventó todo esto y fue el que se llevó el dinero?”, concluyó.
Qué le pasó a Germán Martitegui
En septiembre, Germán Martitegui rompió el silencio después de que se conociera la noticia de que una exempleada doméstica fue detenida acusada de robarle medio millón de dólares.
“Este hecho pasó hace casi 2 meses. Lo venía manejando de otra manera hasta hoy que se hizo público. Yo soy muy reservado y hoy se dieron estos datos, que algunos ni yo conocía”, comenzó diciendo.
“Cuando me enteré hice la denuncia. Esta persona cuidaba a mis chicos cuatro horas por día, todos los días, y lo que pasó fue muy cerca de mi cuarto y del cuarto de mis chicos, así que imaginate lo que es para alguien ese violación de la intimidad”, se lamentó el chef.
Angustiado por la situación, se refirió a la detenida: “Nunca sospeché de ella. Nunca sospeché de nadie. Imaginate que no voy a dejar entrar a mi casa a alguien de quien tengo sospechas. No lo haría nunca”.
“Esto es un carísimo aprendizaje de lo que uno pone en riesgo. Supongo que se identificarán muchas madres y padres que tienen que dejar a sus hijos al cuidado de alguien porque van a trabajar. Es muy difícil depositar esa confianza y estás depositando lo más sagrado que tenés, que son tus hijos”, añadió el cocinero.
Por otra parte, Martitegui quiso ser cauto con sus palabras en todo momento: “Lo que yo quiero aclarar es que nadie de mi parte está acusando a esta persona, que es parte de la investigación que está haciendo la policía. Yo no la acusé y todavía no es culpable porque nadie le dijo que lo era, y hay siete personas involucradas que estuvieron en mi casa en esos cinco días que yo viajé, y que tengamos cuidado porque hay nombres de personas y familias en el medio”.
