Enrique Pinti, de quien se cumplen 83 años de su nacimiento, pidió que nadie comprara flores para recordarlo en su fallecimiento y, si alguien pensaba hacerlo, mejor donara el dinero a la Casa del Teatro. Hasta sus últimos momentos, el gran actor que murió el 27 de marzo pasado, justamente en el Día Mundial del Teatro, pensó en sus colegas.
La larga y exitosa carrera sobre los escenarios, en cine y televisión de Enrique Pinti se extendió por más de seis décadas. Había nacido el 7 de octubre de 1939 en Buenos Aires. Desde los 19 años y durante más de una década estudió y trabajó en la compañía independiente Nuevo Teatro creada por Alejandra Boero y Pedro Asquini.
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Después de interpretar varias obras de teatro, hizo pequeños papeles en El secuestrador, de Leopoldo Torre Nilsson (1958) y Don Segundo Sombra. En 1967 creó su primer gran éxito, la adorable obra teatral infantil Mi bello dragón, que estrenó al año siguiente metiéndose entre las escamas del dragón.
Enrique Pinti: su gran trayectoria
En los setenta empezó a hacer unipersonales en los café-concert, de los cuales fue un precursor. Su primer gran éxito fue Historias recogidas (1972), seguido por una segunda parte. También protagonizó Historias del siete e Historias de Enrique Pinti.
En 1976 debutó en el teatro de revistas El Maipo de gala, de Gerardo Sofovich. Por esos años también actuó con Niní Marshall en su programa de televisión El humor de Niní Marshall y con su gran amigo Antonio Gasalla, con quien escribió Gasalla for export y Gasalla 77. Protagonizó además a distintos personajes célebres de la historia en Pan y circo, dirigida por Gasalla, por la cual recibió su primer premio en Nueva York ese mismo año.
Ese mismo año estrenó la que fue su obra más recordada y premiada en nuestro país y el mundo: su unipersonal Salsa criolla, un musical con la historia de la Argentina desde el encuentro de culturas hasta la actualidad. La obra hizo desternillar de risa pero también reflexionar a más de tres millones de espectadores durante más de una década de manera ininterrumpida.
Mientras tanto, también participó en varias películas. Las más recordadas fueron Juan que reía (1976), Esperando la carroza (1985), con Antonio Gasalla y un elenco fabuloso, Flop (1990), Perdido por perdido (1993), que protagonizó con Ricardo Darín, Secretos compartidos, Tango y Diario para un cuento (las tres estrenadas en 1998); y El asesor (2015).
En los 2000 hizo gran cantidad de obras teatrales y musicales, como Candombe Nacional; Los productores con Guillermo Francella; Hairspray; Pinti recargado; Vale todo; Otra vez sopa y Al fondo a la derecha. Imposible nombrar todas sus obras teatrales, programas televisivos y en la radio, películas y premios.
Enrique Pinti: su último deseo
Enrique Pinti murió a los 82 años el 27 de marzo en el Sanatorio Otamendi, donde estaba internado desde el 5 de marzo por una descompensación producida por su diabetes y problemas circulatorios en las piernas. Además, venía atravesando una gran depresión desde los inicios de la pandemia.
Su amigo, el empresario Carlos Rottemberg, contó tras la muerte del capocómico cuál había sido su última voluntad, que había sido transmitida a la sobrina y asistente del actor, Cipe Fridman. Fue antes de su despedida el lunes 28 de marzo en el hall del Multiteatro Comafi, que fue su escenario donde se cerró por última vez el telón tras una función y donde iba a estrenar Protocolo Pinti.
En diálogo con los conductores del programa Aire de noticia en radio Mitre, el dueño de esa sala teatral dijo que Enrique Pinti “pidió que no se le envíen flores y que si alguien pensaba alguien gastar en eso, lo destine como donación para la Casa del Teatro”. Desde allí, enseguida se corrió la voz.
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Y su última reflexión fue: “Parece increíble, pero hasta el final, Enrique Pinti estuvo pensando en la comunidad artística a la que pertenecía”.
