Pamela Anderson nació el 1º de julio de 1967 en la ciudad de Ladysmith, ubicada en la costa este de la Columbia Británica, Canadá. Sus padres, Barry y Carol Anderson, “todavía están juntos y locamente enamorados”, según destaca en su sitio web la artista, quien también tiene un hermano menor llamado Gerry.
Nacida como Pamela Denise Anderson, fue camarera entre los 16 y los 19 años, edad en la que se mudó a Vancouver y fue allí donde su suerte cambió de una forma tan inesperada como determinante. Casi de casualidad pasó de ser casi una mujer anónima a la modelo con más tapas en la historia de la revista Playboy.
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Durante el verano de 1989, cuando acudió con sus amigos a un partido de los BC Lions de la Liga Canadiense de Fútbol, la pantalla del Estadio BC Place la enfocó. La atractiva rubia llevaba puesta una camiseta de Labatt, una marca de cerveza canadiense, lo que causó que la multitud gritase e incluso la hicieran bajar al campo de juego para que recibiera una ovación.
Como consecuencia, la compañía la contrató brevemente como portavoz; y su entonces novio, Dan Ilicic, produjo un póster de su imagen titulado “The Blue Zone Girl” (“La chica de la zona azul”, en relación a su ubicación dentro del estadio) que fue todo un suceso. A partir de ese momento, el llamado de Playboy fue casi inminente.
Unos meses después, llegaría la primera portada en la histórica revista. “Hugh Hefner (el fundador de Playboy) la amaba y vio su belleza, porque Pamela era una chica hermosa sin maquillaje, además de muy lista y talentosa”, contó alguna vez Jon Peters, empresario y uno de los ex maridos de la actriz.
Cómo llegó Pamela Anderson a Playboy
“El teléfono de mi casa sonó durante una pelea con mi ex novio, espontáneamente acepté la oferta pero para aparecer solo en una portada. Le pregunté a mi mamá y estuvo de acuerdo”, relata Anderson en su página sobre cómo sucedió aquella primera aproximación con el universo Playboy, que la llevó a ser la tapa de la revista erótica en octubre de 1989.
Luego se mudó a Los Ángeles para continuar con su carrera de modelo y, en febrero de 1990, se convirtió en la playmate del mes. Desde ese entonces, apareció al frente de la tirada estadounidense en 14 oportunidades.
“De pequeña era súper tímida. Y de joven, Playboy hizo que me empoderase. Realmente salvó mi vida. Me sentía atrapada y tenía que liberar una parte de mí misma. Para mí supuso un gran avance; allí conocí a muchos artistas, activistas y caballeros. Fue una vida salvaje y divertida”, reconoció quien fuera un símbolo sexual en los 90.
En 2016 fue elegida para ser la portada de la última edición que incluyó mujeres totalmente desnudas. Eso fue en enero de ese año. El actor James Franco entrevistó a Pamela para esa ocasión y ella habló de sus sensaciones la primera vez que posó desnuda para la revista.
“Estaba nerviosa. Después vi las fotos ¡y desde ahí fue difícil que me dejara la ropa puesta! Yo era dolorosamente tímida antes, pero después hubo un click en mi cabeza y entendí que a nadie le importa cómo te ves desnuda excepto a vos”, comentó la actriz.
La ex conejita hoy sigue siendo actriz y modelo. También es vegana, defensora de los derechos animales y miembro activo de la organización Personas por el Trato Ético de los Animales (PETA), con quienes participó en diversas campañas.