A mediados de marzo, Clemente Zavaleta, hijo de María Emilia Fernández Rousse, una de las Trillizas de Oro, sufrió una fuerte caída durante un partido de polo. Tras permanecer internado dos meses y medio, el calvario llegó a su fin y recibió el alta.
Él mismo lo confirmó con un comunicado que publicó en sus redes sociales junto a una foto de cuando era chico. “Agradezco por las oraciones y el soporte recibidos por mi familia, mis amigos, la comunidad del polo, y también por la gente que no conozco que ha rezado por todas partes por mi salud. Agradezco a los equipos médicos de Saint Marys y Shepherd Center por su dedicación y profesionalismo. Agradezco al mundo del periodismo por respetar mi privacidad”, escribió.
Leé también. Las Trillizas de Oro compartieron una foto de Clemente Zavaleta desde la internación.
A modo de cierre, celebró: “Hoy estoy fuera de peligro y agradezco por el amor de Dios, de Jess y de La Virgen Maria, que me dieron fe y energía para salir de esta prueba de la vida y darme una segunda oportunidad. Gracias totales”.
En la cuenta oficial de las Trillizas de Oro replicaron el mensaje del polista.
Cómo fue el accidente que sufrió el hijo polista de una de las Trillizas de Oro
El 18 de marzo, después de que trascendiera la noticia, se dio a conocer el video de la fuerte caída que sufrió el polista Clemente Zavaleta durante un partido en Palm Beach. Las imágenes muestran cómo un rival lo embistió y lo tumbó junto a su caballo, provocándole una lesión en el tronco encefálico.
El hijo de María Emilia Fernández Rousse se fracturó varias costillas y sufrió el sangrado de sus pulmones. Por el golpe, estuvo más de 15 minutos inconsciente y tirado en la cancha.
Clemente, de 36 años, fue retirado del lugar en helicóptero. Al llegar al centro médico, fue inducido al coma y operado de urgencia para drenar un coágulo que se le formó en la cabeza.
Cuando ocurrió el hecho, las Trillizas de Oro se encontraban en compañía de su madre disfrutando unos días de playa en Mar de Cobo. La noticia tomó por sorpresa a María Emilia, que no perdió tiempo y sacó un pasaje para viajar a los Estados Unidos y acompañar a su hijo.
