El Turco García cambió sus hábitos alimenticios y logró una transformación que ni él se imaginaba. Perdió 12 kilos y está feliz de la imagen que le devuelve el espejo. El camino no fue fácil, pero logró el objetivo y espera seguir por esta línea saludable.
De visita a Flor de equipo (Telefe), el exjugador exclamó que la clave de todo fue haber dejado las harinas, aunque no en un ciento por ciento. “Además entreno, juego tres veces por semana. Uno se va viendo mejor. 101 pesaba, y ahora peso 89. Y cuando dejé de jugar, pesaba 85, así que estoy ahí”, agregó.
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García también dio el tip de su desayuno: “Desayuno mate cocido y a veces le mando una o dos galletitas de chocolate. No como fideos, ni ravioles. No me costó porque nunca fui adicto a las harinas, hay gente que sí. La mayoría de los jugadores come pizza, pero en mí es muy raro. Mi debilidad es el dulce”, cerró.
El Turco García habló de su adicción a la cocaína
El deportista abrió su corazón en una entrevista con Gastón Pauls en el programa Seres libres, donde mencionó que era grande cuando probó por primera vez la droga.
“Fue en el 2000, tenía 37 años. Empecé a tomar por curiosidad. Me sentí distinto, bien, entre comillas, y desde ahí empecé a comprar un papelito de un gramo y me duraba un mes”, sostuvo.
Poco a poco, la situación se empezó a descontrolar: “Después era un gramo por día, y después dos y llegué a consumir... En este programa lo voy a decir, nunca dije, porque si la gente me ve así dice ‘la droga no es tan mala, mira qué bien que está’. Pero tomaba muchísimo. No voy a decir los gramos, pero mucho, para morirme, para que me agarre un ACV”.
García reconoció que su esposa sufría mucho al ver cómo se arruinaba. “Mi señora me hacía la comida, y yo iba al baño, me daba un saque y comía. Sufrí mucho cuando mi señora decía que fuéramos a dormir y yo no podía porque me daba taquicardia. En vez de quedarme tranquilo y después irme a dormir, como estaba solo, consumía de nuevo. Me iba a dormir cuando ella se levantaba. Era un asco. La fuerza que me da para no consumir es todo lo mal que la pasé, las mentiras que decía”, cerró.
