Luis Ventura explotó en vivo en Intrusos y confesó el drama que está viviendo su pareja. Estelita, su mujer, participa de la obra Fiestísima regargada, en Mar del Plata, que no fue precisamente un éxito y atraviesa problemas. La mujer del periodista, como otros actores, espera que le paguen y no quiere irse del espectáculo hasta que esto no suceda. Ventura está indignado. "Ella podrá estar feliz, disfrutando. La verdad, mis hijos y yo la pasamos como la mierda", dijo.
El periodista le reclama a su esposa que por estar en el espectáculo descuida a la familia. No le gusta el lugar en el que trabaja ni tolera tener que ponerse en un rol más activo en cuanto a las tareas de la casa.
"¿Qué tiene que estar haciendo la mujer y la madre de mis hijos en esa mierda? Porque ella no lo necesita y nosotros tampoco. Estamos hablando de calidad de vida. Ella no necesita esa calidad de vida", dijo, ante la consulta de Jorge Rial. Hasta ahora, Ventura se había mantenido al margen del tema, pero no lo pudo contener más. "Fui dos veces en todo el verano a Mar del Plata, porque yo iba a terminar en una comisaria", afirmó.
Y contó las cosas que no le gustaron de la obra: "Yo no pisaba mas ese teatro. Yo vi los movimientos, las miradas y vi un montón de acciones que se me retuercen las tripas del asco que me da, gente que vende a la madre por dos centavos. Por eso le dije a mi mujer, ´renunciá a la guita y volvé´".
"Aborrezco verla en el estado en que esta ella. Yo estoy en crisis en mi pareja por esta mierda. He perdido a la madre de mis hijos, mis hijos han perdido a asu madre durante tres meses y pico. Acepto la vocación, las ganas, acepto todo y me la banco porque es mi compañera de vuelo de hace casi 30 años de pareja. Eso no quita que me banque un montón de cosas. No me banco verla como yo la veo. No es la persona que yo conozco, es otra persona", continuó, muy enojado.
Y se preguntó: "¿Por qué sacar la mierda para afuera, por tres mangos mugrientos que pueden darle? Hay mucha gente que esta ahí que roba la media sin sacar los zapatos. Por dos mangos te cortan la cabeza, los dedos, la mano, hay resaca humana ahí. Yo no quiero a alguien que yo quiero mezclado en esa mierda. Dirán que soy machista, digan lo que quieran".
Luego contó cómo se vive la situación en la intimidad de la familia: "Mis hijos haciendo la comida. Yo yendo a buscar cómo se lava la ropa. A ver quién viene. No puedo tomar decisiones. Tengo 2 heladeras hace 30 años, con las que yo crecí, se me rompió una y yo no compro otra porque tengo que estar esperando que mi mujer se digne volver. Mi casa hace 3, 4 meses que está parada". Y definió: "No es un reproche, es un sentimiento".
"Ella podrá estar feliz, disfrutando. La verdad, mis hijos y yo la pasamos como la mierda", afirmó, y agregó: "Se hizo una votación y mis hijos votaron que la madre tenia que ir. Yo voté que no porque sabía que iba a terminar en esta cagada, todo el mundo peleado, choreandose la guita, cerrando las puertas del camarín".
