Kim Kardashian sigue en Cannes (aunque no sabemos bien por qué). Anoche, acompañó a su novio, el rapero Kanye West, a la presentación de su película Cruel Summer
La diva del reality eligió un vestido mini súper dramático de Balmain en tonos dorados y botitas negras de Giuseppe Zanotti for Balmain. El calzado fue una opción desacertada para Kardashian pero el vestido le quedaba como hecho a medida.
Sin embargo, Kim no es la primera en calzarse ese vestido de Balmain. En noviembre del año pasado, la supermodelo de Victoria's Secret Alessandra Ambrosio, lo eligió para el famoso desfile anual de la marca de lencería. También hizo lo mismo la actriz de Avatar, Zoe Saldana, en agosto de 2011, para la premiere de su película Colombiana en Miami.
Al parecer, Kim no pega una: ayer le pasó lo mismo con un conjunto calado de Emilio Pucci que ya había usado Gwyneth Paltrow para los premios Emmy 2011.
Si bien para nosotros -los no famosos, los comunes- nos puede parecer algo trivial el hecho de repetir un vestido, en el mundillo de las celebrities es grave y el error se adjudica en primer lugar a los estilistas y después a las casas de moda que prestan sus diseños.
¿Por qué es malo? Porque en el caso de Kim, por ejemplo, su principal capital son las apariciones en eventos - de allí sale toda su publicidad. Y ser noticia por un vestido repetido no está nada bueno.
