Si la rutina es una característica definitoria del matrimonio, ¿qué puede pasar cuando una nueva rutina, extraña y sangrienta, trastoca el ritmo de la vida conyugal? Sobre un relato de Iosi Havilio, Santiago Mitre (La Cordillera), filmó Pequeña flor, su quinto film, que ayer inauguró el BAFICI a sala llena.
Se trata de la historia de un dibujante (Daniel Hendler), que se instala junto a su mujer francesa (Vimala Pons) y su pequeña beba, en una ciudad francesa. Allí entabla una rara amistad con un vecino sibarita, amante del jazz.
Leé también: José Luis Cabezas: el documental “El Fotógrafo y el Cartero” se estrena en el BAFICI
No conviene contar mucho más acerca de esta película tan original y “chabroliana”, como distinta a lo que viene haciendo Mitre, que muy pronto estrenará Argentina, 1985, sobre el juicio a las juntas.
Pequeña flor, escrita junto a Mariano Llinás, como todos sus films, es una comedia negra, hablada en francés salpicado de español, divertida e imprevisible. Una elección, para la apertura, que reconfirma la identidad del festival porteño: Mitre, como Llinás, es una especie de hijo artístico del festival, donde mostró sus primeras películas (la colectiva El amor-primera parte y El estudiante).
Qué podés ver en el BAFICI 2022
El cierre del BAFICI, en diez días, será con la elogiada Nobody’s Hero, del francés Alain Guiraudie, otra figura que ha estado presente, con retrospectiva especial, en el festival. La historia de un encuentro amoroso entre un hombre y una prostituta durante una Navidad sacudida por un atentado terrorista.
En el medio, nombres de peso pesado, como Marco Bellocchio, Nanni Moretti, Paul Schrader (se verá en El contador de cartas, con Oscar Isaac). También hay retrospectivas de cineastas independientes, como Pascale Bodet, David Fisher y Genadzi Buto; y clases magistrales de cineastas de culto, como el canadiense Bruce La Bruce, que presentará su último film queer y formará parte del jurado de Vanguardia y género, una de las tres competencias oficiales.
En la extensa programación (425 funciones, 290 películas) hay muchos estrenos locales. Este es el caso de El fotógrafo y el cartero, el documental sobre el crimen de José Luis Cabezas, a cargo del equipo que hizo el de María Marta García Belsunce.
Pero BAFICI tiene películas de todo el mundo, en secciones que cruzan largos y cortos (como el precioso Ahora ya sé dónde encontrarte, de Diego Berakha, elegido para la apertura) ficciones y documentales, para recuperar la capacidad de sorpresa adormecida por el consumo de audiovisuales algorítmicos. Y lo mismo con BAFICITO, la exquisita sección de cine animado para toda la familia.
Cómo y dónde ver las películas del BAFICI 2022
Las nuevas sedes, porteño céntricas, pueden leerse como toda una declaración de principios. Volver a las (grandes) salas, pero además a las del centro. Las que sobreviven en la peatonal Lavalle, y todavía no fueron convertidas en templos evangelistas. Las de la calle Corrientes: el Cultural San Martín, el Lorca, la Lugones, entre otras.
Las entradas cuestan 150 pesos, pero las películas se pueden ver también desde cualquier lugar del país a través de la plataforma Vivamos Cultura. Que sigan las funciones.
