Adriana Aguirre conversó con Intrusos, el ciclo de América, donde promocionó Un loco súper show, la obra que encabeza en Mar del Plata y que iba a compartir con Ricardo García, su expareja, que renunció antes del debut. Durante la nota, la actriz y vedette dio detalles de su separación -que se dio por una infidelidad de él- y reveló cuál fue el acuerdo económico al que llegaron después de compartir 26 años juntos.
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Todo comenzó cuando le consultaron si la convivencia que tuvieron en cuarentena se extendería luego de la temporada teatral y la actriz aclaró: “No. Nosotros ya tenemos una separación de hecho firmada cuatro días antes de venir acá y estamos esperando que se termine la feria para que sorteen el juzgado y entre el expediente de divorcio que hicimos de común acuerdo”.
Entonces explicó que tienen dos propiedades y que ella se quedará en la de Barrio Norte, mientras que él deberá irse a la de Mataderos: “Le tocó así. Si hacemos las cosas como deberían ser de acuerdo a lo que me pasó, la damnificada soy yo. En el 2011 hubo una reforma del código civil en donde si vos le hacés una cosa así a una mujer, debés pagarle. La figura del adulterio fue reemplazada por la compensación económica. Hace un año que Ricardo debía pagarme casi 60 millones de pesos por los 26 años juntos. Pasó un año más así que imaginate con los intereses... pero llegamos a un arreglo”.
Aunque aseguró que hoy le da igual lo que García haga de su vida porque ya no lo ama, admitió que en su momento la infidelidad le dolió muchísimo: “Quizás otras mujeres hacen la vista gorda si su marido tiene amantes. Yo no porque lo amaba. Estaba rota. Lo perdoné, pero no fue un desliz sino que tiene una pareja. Que sea feliz y viva una linda vida. Lo nuestro está terminado”.
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Sin embargo, Débora D’Amato quiso saber si durante la convivencia obligada se habían confundido y habían vuelto a tener un affaire, pero Adriana lo negó rotundamente: “Mientras convivimos él todo el tiempo hablaba con la que es su novia y yo empecé a conocer a un abogado”. Respecto al hombre en cuestión, contó que integra uno de los cinco estudios más grande del país, que tiene 56 años, es inteligente, de perfil bajo y que pasó Año Nuevo con él. Para evitar malos entendidos, aclaró que su nueva relación está dentro de la legalidad porque con Ricardo ya le habían puesto un punto final a su relación.
