Para compensar el mayor trabajo realizado a partir del coronavirus y el aislamiento social, el intendente de Laprida Pablo Torres anunció que les pagará un bono a los trabajadores municipales y a los esenciales, pero, para eso, propuso cobrarles una tasa “alfajor Jorgito simple” a los propietarios de grandes campos.
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“Anunciamos un pago estímulo para trabajadores municipales por el esfuerzo durante la cuarentena. Ofrecimos a SOEM y UPCN $12.000 para todos los trabajadores municipales y un extra de $5.000 (cobrarán $17.000 en total) para los esenciales. Aceptaron”, confirmó en sus redes sociales.
“Se cobrará a finales de noviembre y se financiará con una tasa de $35 (un alfajor Jorgito simple) por hectárea y por única vez a las producciones de más de 400 hectáreas y un monto a grandes empresas (bancos, electricidad, gas, televisión por cable, telefonía) de capitales no lapridenses (no afecta a comercio ni industria local)”, explicó.
Ni bien envió el proyecto al Concejo Deliberante, donde tiene siete ediles de doce bancas, los de Juntos por el Cambio propusieron como alternativa que el estímulo a los municipales y los esenciales sea financiado con el medio aguinaldo de diciembre de los funcionarios del municipio.
Por su parte, el presidente de la Sociedad Rural de Laprida Luis Crippa rechazó la iniciativa. “El intendente se mandó solo. No nos consultó nada. La plata siempre sale del mismo sector. Creemos que no debe ser así”, consideró, según publicó La Nación.
El jefe comunal defendió su propuesta. “Mejor que decir es hacer”, escribió en sus redes sociales para revelar que él ya había hecho su parte al rebajarse el sueldo: “Nunca lo dije porque me parece que no hay que hacer bandera con esto, pero ante la aparición de ‘indignados’ que, por negarse a poner $35 para premiar a nuestros trabajadores esenciales, reclaman que los políticos locales se bajen el sueldo, voy a tener que decirlo: el 10 de diciembre, cuando asumí, puse por decreto un tope a mi sueldo de intendente, que implicó una rebaja del 30% de mi salario, por lo que hoy mi salario es el 40% menos del que podría cobrar. Devuelvo al Municipio $100.000 por mes: a lo largo del año entregaré al 1,2 millones de pesos”.
En ese sentido, rechazó financiar el bono a los municipales y esenciales con el medio aguinaldo de los funcionarios: “No voy a comprometer el sueldo de ellos porque ganan poco en comparación a la dedicación que le ponen. Un director gana $60 mil, un secretario $90 mil. Trabajan 12, 14 o 16 horas diarias. No tienen sábado ni domingo. Les doy cinco días de vacaciones por año”.
“El problema es ideológico porque el dinero de la tasa para el bono es mínimo (y más mínimo aún si se lo compara con el aporte anual que hago como intendente). La cháchara antipolítica suena bien, pero cuando vamos a la realidad se ve que es solo cháchara”, retrucó.
Torres, aunque de manera irónica, instó a los políticos opositores a hacer lo que propusieron en rechazo a la tasa del “alfajor Jorgito simple”: “Espero que los concejales de la oposición mañana lunes presenten la nota de la donación de sus aguinaldos. Con eso no alcanzarán a cubrir lo que no aportaron al Fondo de Emergencias en Salud durante estos 13 años, pero al menos será un gesto de resarcimiento”.