El arrepentido en la causa Ciccone, Alejandro Vandenbroele, renunció al Programa de Protección de Testigos luego de que el Gobierno anunciara una auditoría "profunda" de los acuerdos con arrepentidos y tras rechazar haber recibido dinero a cambio de declarar contra el exvicepresidente Amado Boudou.
// Alejandro Vandenbroele rompió el silencio: “Nadie me pagó por declarar”
A su vez, la defensa de Vandenbroele adelantó que realizará una presentación ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Según pudo saber TN.com.ar, el hombre sindicado como testaferro de Boudou, decidió salir del programa debido a la filtración de su legado (de carácter privado). Esto llevó a que se lo acusara de haber cobrado dinero para declarar en contra del exfuncionario y que el Ejecutivo anunciara la decisión de analizar su acuerdo como arrepentido.
“Nunca nadie me pagó ni me ofreció dinero para declarar en el juicio por Ciccone”, sostuvo en una entrevista exclusiva con TN. En este sentido, dijo que no recibió un hotel como forma de pago (como en algún momento trascendió) pero que sí recibe una asignación económica dispuesta por la ley.
“Cuando uno entra al Programa de Testigos cambia su vida social, familiar y laboral. Estuve mucho tiempo con medidas restrictivas que no me permitían desempeñar mi vida normalmente, y en ese marco se hace una asignación económica según la ley”, explicó.
Pero un día después del reportaje, Juan Martín Mena, secretario de Justicia, salió al cruce de Vandenbroele: "Se viola el primer principio del Programa que es la confidencialidad". A su vez, dijo que la asistencia económica "incluye un hotel o posada".
En la última semana, Alberto Fernández firmó un decreto para que el Gobierno vuelva a controlar el programa de Protección a Testigos. Esto también motivó al amigo de Boudou a cambiar su posición.
El exvicepresidente fue condenado a cinco años y diez meses de prisión por el caso Ciccone, en el que se investigó al expropiación ilegal de la empresa.