Los periodistas Noelia Barral Grigera y Esteban Rafele presentaron en la Biblioteca del Congreso de la Nación el libro El Otro Yo, una biografía del empresario Nicolás Caputo, mejor amigo, socio y operador político del presidente Mauricio Macri.
Acompañados por los periodistas Alejandro Bercovich y Martín Sivak, los autores contaron detalles sobre la relación entre los dos amigos, que se conocen desde la escuela primaria y construyeron juntos el ascenso de Macri a la Presidencia de la Nación.
El poderoso empresario, a quien Macri define como su "hermano de la vida", no tiene cargos en la administración nacional, pero sí influencia sobre el jefe de Estado.
El libro cuenta que Caputo fue el principal recaudador del PRO en las elecciones presidenciales de 2015 y también el que instaló a Gabriela Michetti como candidata a vice de Macri, pese a la exclusión interna en la que había quedado tras perder la pulseada contra Horacio Rodríguez Larreta en la Ciudad.
"Nicolás dice que solo opina si Mauricio se lo pide. Pero que, cuando lo hace, no ahorra críticas", dijo Barral Grigera. "No se puede entender quién es Mauricio Macri sin conocer a Nicolás Caputo. Son, como lo definieron distintas fuentes consultadas en la investigación y que hoy integran el gabinete nacional, dos caras de la misma moneda".
El otro yo. Nicolas Caputo, socio y operador secreto de Mauricio Macri en la Argentina del capitalismo de amigos, cuenta la hostoria de dos personas que conocen desde los cinco años: fueron al colegio Cardenal Newman en la primaria y secundaria y siguieron juntos en la Universidad Católica Argentina. Los dos se independizaron de sus padres para fundar una empresa, entraron en Boca Juniors y de la mano llegaron, primero, a gobernar la Ciudad de Buenos Aires y, luego, a ganar la elección presidencial.
El libro se basa en documentos inéditos y el testimonio de cincuenta entrevistados, que incluye la primera entrevista con Caputo.
Caputo llevó los seis millones de dólares del rescate de Macri cuando estuvo secuestrado en 1990, fue responsable de recaudar los ciento cinco millones de dólares que costó la campaña presidencial 2015 y figura como el principal deudor del Presidente en su declaración jurada. También hizo inversiones que, legalmente, su amigo no podía hacer como presidente de Boca: se asoció con Marcelo Tinelli en el Badajoz de España y perdió fortunas. Sus empresas hicieron negocios con el Estado mientras su amigo y socio administraba la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y después la nación.
