El fiscal federal Gerardo Pollicita pidió informes sobre los teléfonos fijos y móviles usados por la expresidenta Cristina Kirchner y los demás imputados en el caso, como el excanciller Héctor Timerman y el exsecretario Legal y Técnico Carlos Zannini, entre otros. Se trata de una ampliación de las medidas de prueba en el caso que investiga la denuncia del fiscal federal Alberto Nisman por la firma del Memorando con Irán, por presunto encubrimiento por el atentado a la AMIA.
La medida fue solicitada a una oficina de la Corte Suprema de Justicia de la Nación y consiste en la identificación de los números tanto fijos como móviles desde el 10 de enero a la fecha, además de los mencionados, del exministro de Planificación Julio de Vido, del exjefe de la AFI Oscar Parrilli, de la exProcuradora del Tesoro de la Nación Angelina Abbona (todos funcionarios de Cristina), del líder de Quebracho Fernando Esteche y del exespía Ramón Allan Bogado.
El fiscal reclamó que una vez identificadas las líneas telefónicas se le pida a las empresas de comunicaciones el listado de llamadas entrantes y salientes de los imputados. El objetivo final es el de realizar un entrecruzamiento de llamados. En su presentación ante el juez federal Ariel Lijo, que está a cargo de la causa, el funcionario judicial pidió además que todas las compañías aéreas remitan listado de viajes del exterior que hicieron entre 2006 y 2015 Esteche, Bogado, el presunto agente iraní Jorge "Yussuf" Khalil y el exjuez Luis Yrimia.
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// La denuncia de Nisman en tres minutos
El 14 de enero de 2015 Nisman denunció a la entonces presidenta y a su canciller Timerman, entre otros, por presunto encubrimiento a los iraníes acusados de haber participado del atentado a la AMIA, ocurrido en 1994, que provocó la muerte de 85 personas. Cuatro días después de su presentación el fiscal apareció muerto en el baño del departamento de Puerto Madero donde vivía, con un tiro en la cabeza.
Al día siguiente el extitular de la UFI-AMIA debía exponer en el Congreso sobre su denuncia, en la que había advertido sobre la supuesta "existencia de un plan delictivo destinado a encubrir y dotar de impunidad a los ciudadanos de nacionalidad iraní imputados" por el atentado.
